Los constantes enfrentamientos familiares provocaron que lo que debería ser un momento de felicidad familiar , terminase en convertirse en una pesadilla. La relación entre Diego Matamoros y su padre, Kiko Matamoros no es para nada buena desde hace algún tiempo debido a esto hasta hace pocos días el colaborador afirmaba que no asistiría a la boda de su hijo. Todos estaban a la espera de respuesta del colaborador, más el mismo no la hizo pública en ningún momento.

Sin embargo, el día tan esperado llegó y Kiko Matamoros dio el batacazo presentándose en la finca donde se realizaba dicho evento, sorprendiendo a todos con su presencia.

Presencia inesperada

Muchos apostaban a que el colaborador no cambiase de opinión. Pero como todo padre que ama a sus hijos sobre todas las cosas, cambió de opinión y decidió asistir a la boda de Diego. Kike Calleja estuvo presente en la Finca Prados Moros, lugar donde se realizaba la celebración. Pudo hablar con Kiko Matamoros y hacer algunas preguntas a este. Una de ellas fue si era cierto que había asistido al matrimonio de su hijo para suplantar a Mar Flores.

El colaborador lo desmintió, quien dijo que esa mujer tenía más cara que espalda. Agregó que Mar Flores No había asistido porque no había en el lugar ningún millonario que pudiese pescar. Estos comentarios parecieron muy duros a los ojos de Kike Calleja, quien se lo hizo saber a su compañero.

Pero esto no le pareció de importancia al colaborador.

Lo que sí admitió Kiko fue que le había costado muchísimo cambiar de opinión. Pero pensaba que en una fecha tan importante como esa era precisa su presencia, todo aquello pensando en las consecuencias que podría acarrear a posterior su falta en ese momento tan importante en la vida de Diego.

Makoke y la boda

El colaborador comentó que su esposa, Makoke entendía perfectamente la relación existente entre él y sus hijos, por lo que no puso ningún tipo de negativa para que este asistiera a la boda, además no estaba interesada en que los conflictos entre ambos se incrementaran.

Mientras Kike Calleja conversaba con Kiko Matamoros, llegó el novio en un coche espectacular junto a su hermana Laura, quien era la madrina de la boda.

El novio lucía un chaqué y la novia un vestido clásico sencillo y juvenil. Diego le regaló los pendientes de novia de oro blanco y brillantes, por su parte la chica le regaló los zapatos que usaría en la boda.

La seguridad era impresionante con el fin de evitar que se filtrasen imágenes, las medidas previstas incluirían inhibidores de drones.