Hay asuntos que, por lo delicado de su naturaleza y por la gravedad que en sí constituyen, no deben ser revelados con trazo grueso, sino que deben ser matizados hasta la saciedad y narrados de una forma pedagógica y con documentos en los que uno se apoye y le den credibilidad ante la audiencia. Muy especialmente cuando la mitad de esta no está por la labor de creernos.
Pues bien. Eso es lo que ha empujado a Belén Esteban a abandonar la jauría habitual de Sálvame y Sábado Deluxe -y por qué no decirlo, también de la tertulia rosa de El programa de Ana Rosa- y sentarse en el único espacio que admite lugar a la reflexión y a la calma cuando se habla de la crónica social en Telecinco como lo es el magacín vespertino dominical Viva la Vida con Toñi Moreno.
Tanto es así, que este ha sido el lugar escogido por la conocida como la princesa del pueblo para aclarar todo aquello que hasta ahora no había quedado meridianamente claro y que requería, por la complejidad del juicio que le ha tenido enfrentada a Toño Sanchís durante más de dos años, una explicación más profunda y sosegada.
Las respuestas por resolver del 'Toñogate'
Y es que, tras la publicación del fallo a su favor en el conocido como Toñogate, Belén Esteban había venido hablando de su triunfo, dando las gracias a los que han estado cerca suyo, pasando factura y algo más al que fuera su representante, pero no había habido tiempo alguno para explayarse largo y tendido sobre los pormenores del que ha sido, sin duda, el juicio del año para el mundo del corazón en España.
Algo que la propia Telecinco anunciaba ya en su promoción sobre esta esperada entrevista adelantando que había llegado el momento de: "aclarar todas las dudas" y poner el acento en todos "los flecos" que han quedado encima de la mesa tras este juicio y que solo son capaces de entenderse si uno se lee la totalidad de la sentencia de este caso, o explicándose pedagógicamente como Belén pretende hacer de la mano de Toñi Moreno.
La verdad sobre el juicio: Toño frente a Belén
Sobre este asunto cabe recordar que cuando hablamos de Toñi Moreno lo hacemos también de una de las grandes amigas, defensoras y apoyos de la que fuera pareja de Jesulín de Ubrique, en Mediaset España. Situación que resulta tremendamente curiosa teniendo en cuenta las colaboraciones que allí realiza eventualmente el que fuera su manager durante más de diez años.
De ahí que se sienta de lo más cómoda al revelar, una a una, todas las barbaridades empresariales, mangoneos, arreglos por detrás y acuerdos a sus espaldas que este habría cometido con ella, claro está, siempre según su versión.