Algunos medios, entre ellos la web de la revista “Fotogramas”, contaron hoy que Pedro Almodóvar, estos días Presidente del Jurado en el Festival de Cannes, que había apoyado la decisión del prestigioso festival francés de Cine de negarse a que películas producidas por la plataforma Netflix compitan por la Palma de Oro desde 2018 si no son proyectadas en cines franceses previamente, iba a dirigir próximamente una serie para dicha plataforma. Daban por sentado que se contradecía en su afirmación de cuando se presentó ante los medios.

Pues la productora del cineasta, El Deseo, por medio de su hermano Agustín, desmiente rotundamente que eso sea un firme propósito.

Que tiene ofertas de varias plataformas, pero que todavía no ha dicho nada. Además, el propio cineasta ha confesado que no ve muchas Series televisivas, que no le gusta la “narración fragmentada, que te dejan con un Continuará”, como define él a una serie por episodios, y que prefiere lo que hace siempre en sus películas.

Pero sugiere que en una serie podría plantear algo que en su filmografía le ha dado algún problema: “Lo que he pensado, y que no se podría desarrollar de otra forma que en una serie, es un relato multitudinario en cuanto a personajes protagonistas. Hacerla en cine sería demasiado extenso, con demasiadas ramificaciones. A veces he tenido ese problema y no he sabido controlarlo, de una inflación de historias dentro de una historia.

Y una serie permite eso, como una gran novela”.

Lo curioso es que algunos medios, detractores a ultranza del cineasta y de sus películas, han querido aprovechar estos rumores de que iba a trabajar “a pesar de todo” con Netflix para desacreditarle. Incluso esos y otros medios presionan o desean que Cannes 2017 lo gane alguna película precisamente de Netflix, de la cual compiten dos, o de cineastas americanos que según la crítica internacional han aportado lo mejor a la Sección Oficial de este año, en donde las películas europeas presentes, salvo François Ozon con su “L’amant doublé”, han decepcionado, sobre todo Michael Haneke, un peso pesado habitual de Cannes que ha recibido críticas destructivas incluso desde sus fans.

Vamos, que desean ver a Almodóvar dándole la Palma de Oro a una película “para toda la familia”, lejos de su concepción del Cine, y así quitarse el sabor de boca que a algunos les quedó con Steven Spielberg y su insólita entrega de la Palma de Oro a “La vida de Adèle”, radicalmente distinta a su estilo de Cine y convicciones morales.

Por otro lado, conociendo a Almodóvar, si trabara para alguna de las plataformas de Internet que ahora producen películas, exigiría libertad artística absoluta, como lo exige Woody Allen y lo exigía Stanley Kubrick, por citar otros dos maestros del Cine con estilo propio. Y aunque Netflix llega a todo el planeta y Almodóvar tiene asegurado mucho público mundial, no se sabe si accederán o le impondrán ciertas normas para que su película o serie sea más “comercial”.

Mientras, el Festival de Cannes llega a su recta final y en pocas horas se sabrá el palmarés, con Almodóvar presidiendo un Jurado con grandes maestros y maestras del Cine (cineastas como Paolo Sorrentino, Maren Ade o Agnès Jaoui) y algunos actores como Jessica Chastain o Will Smith.

De éste último ha circulado, por cierto, una especie de chiste sobre él en el Festival: “¿Gustará esta película a Will Smith?”, ya que casi todas son radicalmente distintas a las que él ha protagonizado, y nadie le imaginaría en la de Haneke o en el biopic sobre Auguste Rodin con Vincent Lindon, por ejemplo, pese a que hace años, para prepararse su papel de “En busca de la felicidad”, que le valió una nominación al Óscar, se vio previamente un montón de películas del Neorrealismo italiano, entre ellas “Ladrón de bicicletas”.