Durante los meses de verano mueren más perros que en invierno debido a las altas temperaturas, por causa de golpes de calor. Esta enfermedad está provocada por un aumento de la temperatura del animal y alcanza peligrosas consecuencias.

Para que no se confunda con un episodio febril, se debe de distinguir entre el golpe de calor y fiebre. Aunque la temperatura corporal del perro aumente en ocasiones, las procedencias y los tratamientos del veterinario son diferentes.

El golpe de calor provoca excesiva salivación, jadeos y descontrol progresivo en la respiración a partir de los 40 grados centígrados.

De modo que el perro puede llegar a tener otros efectos peores para su bienestar como son: perder el equilibrio, convulsionar, pérdida de la conciencia; junto a periodos de vómitos y diarreas.

Pero esta exageración de la temperatura corporal es debido a distintos causantes entre los que se encuentran la edad, el sobrepeso o si tiene el hocico chato y el clima. Es primordial estar atento a los síntomas que manifieste, porque los daños podrían ser irreversibles e implicar la vida del mejor amigo del hombre.

Algunas causas del golpe de calor

Tener el hocico chato les hace susceptibles a enfermedades respiratorias, dado que los perros no sudan y eliminan el calor por la respiración. Cachorros en edad de lactancia o inferiores a un año y perros de alrededor de 10 años también son propensos.

Sin embargo, junto a la edad, la obesidad y las enfermedades del corazón, respiratorias o del sistema nervioso reducen el volumen del organismo de los perros para perder el exceso de calor.

También puede deberse a hacer deporte o paseos más largos, la escasez de agua, el aislamiento del animal en espacios pequeños como en vehículos.

Estos últimos se convierten en hornos a altas temperaturas llegando a ser donde surge uno de los mayores índices de mortandad en los perros, durante la época veraniega, pero hay que recordar que dejar a un can en el interior del coche, puede suponer la muerte y a su propietario una sanción económica entre 3.000 y 30.000€.

Al primer síntoma se debe tratar de disminuir la temperatura corporal del perro

Si se observa ciertos síntomas se debe de acudir al veterinario más próximo. Pero, si no es posible acudir al veterinario, hay que intentar disminuir la temperatura corporal trasladando al animal a un lugar sombreado y fresco, para regular su temperatura. En el interior de los hogares en donde el suelo sea de baldosa, ya que esto facilitará que baje la temperatura. Observándose una mejoría, humedecer al perro con una manguera, baños en la bañera o una bayeta húmeda hará que las constantes vitales empiecen a regresar de nuevo a una normalidad de calma.

Cómo evitar un golpe de calor en perros

Sin embargo, lo mejor para poder sortear estos sustos, evite pasear entre las principales horas del día 12:00 y las 19:00, especialmente en días de más calor.

Durante y después de la caminata debe disfrutar de agua fresca, pero no congelada, siendo vigilado, porque puede ingerirla de forma rápida.

Además, en el mercado podemos encontrar accesorios refrigerantes como colchonetas, collares, arneses, entre otros, ya que ayudan a refrescarles, dado a que se introduce en el congelador, para su uso. Pero sin duda, prevenir y tratar las enfermedades que pueda tener es la mejor prevención para su bienestar y salud.