El método Sakuma es un nuevo y revolucionario sistema de adelgazamiento en el que, con tan sólo cinco minutos diarios y una tabla de cinco ejercicios, se nota cómo la figura se parece más a la de un o una modelo: esbelta y tonificada.
Una manera diferente y sencilla para tener un cuerpo tonificado
Procedente de Japón, el entrenador personal Kinichi Sakuma ha ideado este método con el fin de corregir los malos hábitos que se cometen a la hora de querer adelgazar. El más común es que "mucha gente piensa, erróneamente, que se puede perder peso ejercitando las áreas donde se quiere adelgazar".
Y añade que "no hay que usar los músculos que son voluminosos; hay que reducir su volumen". El secreto no es otro que el de cambiar los músculos que se suelen ejercitar por otros y así evitar el efecto rebote.
En su libro "El método Sakuma" no solo explica la tabla de ejercicios con ejemplos visuales, sino que además hace un breve repaso de nutrición, ejercicios de refuerzo y casos reales donde ha sido un éxito su método. Si ya están instaurados en la cultura popular los nuevos estilos de vida saludable, los entrenamientos donde se equilibran cuerpo y mente y los modos de existencia sostenibles, el método Sakuma viene para quedarse. Un método que rompe todos los patrones de culto al cuerpo y las incontables (e incansables) horas en el gimnasio.
Cinco ejercicios son los responsables de este método y cinco los objetivos que persigue: reducir el volumen del tren inferior, tonificar las caderas, estilizar la cintura, tonificar el torso y equilibrar el cuerpo.
La tabla de ejercicios del método Sakuma
Para reducir el volumen del tren inferior: tumbarse boca abajo en el suelo, elevar torso y piernas al mismo tiempo.
Mantener diez segundos esta postura haciendo fuerza con los tobillos para que no se separen. Repetir tres veces.
Para tonificar las caderas: tumbarse boca abajo, cruzar los tobillos y separar bien las rodillas a modo de ranita. Separar los muslos del suelo, mantener seis segundos y repetir diez veces.
Para estilizar la cintura: sentarse en una silla o en el suelo, levantar las caderas.
Sostener tres segundos y repetir diez veces alternando los lados (uno cada vez).
Para tonificar el torso: sentarse en una silla o en la cama con los brazos cruzados y levantar los brazos hasta llevarlos detrás de la cabeza. Mantener seis segundos y repetir diez veces.
Para equilibrar todo el cuerpo: ponerse de cuclillas e inclinar el torso hacia delante. Llevar hacia el techo todo el cuerpo de golpe hasta ponerse de puntillas. Repetir diez veces.
Para que todo esto tenga resultados, el método requiere de un cambio en los hábitos alimenticios para que sean más saludables y en la disciplina de practicar los ejercicios de forma sistemática, tal y como se describen en el libro. No se trata de esperar a que se cumpla el deseo con los ojos cerrados mientras se frota la lámpara mágica, sino de incorporar en la rutina de ejercicios este método que puede despertar en nuestros cuerpos aquellos músculos que no se suelen utilizar. El método Sakuma es fácil, sencillo y adaptado para todo aquel que se atreva.