El prepucio se forma desde la vida intrauterina, y al nacer se encuentra adherido a la la parte anterior del pene, llamada glande, por lo que lo cubre por completo, a eso se suele llamar fimosis ¿Cuál debe ser el manejo de los padres y del Pediatra con respecto a esto?
Tipos de fimosis
Quiere decir que al nacer todos los Niños tienen una fimosis fisiológica , que algunos suelen llamar prepucio no retráctil, sin embargo, a medida que el niño crece el prepucio se va despegando poco a poco gracias a la descamación celular fisiológica y a las erecciones intermitentes, según algunos autores hasta la pubertad cuando se despega por completo..
Por tanto, cuando se habla de fimosis como tal, va a depender de si el prepucio se logra retraer parcialmente o no se retrae en lo absoluto, y de allí los términos de fimosis parcial y fimosis completa respectivamente.
Clínica y complicaciones
Cuando existe verdadera fimosis el paciente puede quejarse de dificultad al orinar, tener síntomas de infección urinaria, dolor o molestias durante la actividad sexual. Además, la presencia de fimosis, al dificultar la higiene puede predisponer a acumulación de esmegma con formación de quistes o incluso infección del glande, y raramente algunos consideran que la fimosis puede predisponer al cáncer de pene
En algunas oportunidades pueden existir solo adherencias entre el glande y el prepucio, que pueden ser la causa de la fimosis; y en otras cuando se intenta retraer el prepucio en presencia de fimosis y logra pasar el glande a través del orificio, llamado anillo fimótico, el glande puede hincharse y quedar atrapado y no se logra llevar a su posición normal, a eso se le llama parafimosis, considerada como una emergencia y que a veces no cede manualmente.
¿Qué hacer?
Se considera normal hasta aproximadamente los 10 años de edad que el prepucio no sea retráctil, y esto no requiere de ninguna intervención. En caso de que pasados los 10 años aún no se pueda retraer el prepucio sobre el glande o si antes de edad presenta dificultad para la micción debido a la incapacidad de retraer el prepucio, se recomiendan estiramientos manuales progresivos.
Otra alternativa, a partir de los 3 años es la aplicación de cremas a base de esteroides, ya que el esteroide es capaz disminuir el proceso inflamatorio.
Aunque trae controversia, también existen opciones quirúrgicas, entre las que están están la eliminación del frenillo, incisiones en el prepucio o su retiro, bien sea parcial o total, que es la circuncisión.
Con respecto a esta última opción quirúrgica, si bien en algunos países la realizan de forma rutinaria, haya o no fimosis, su realización trae controversia, y algunos consideran que debería ser el último recurso a utilizar, haciendo un balance riesgo/beneficio. De cualquier manera, debe ser el pediatra el que oriente a los padres y cada caso debe ser individualizado.
