El síndrome boca-mano-pie es una infección viral que se caracteriza por presentar unas pequeñas úlceras dolorosas en la boca y un exantema o erupción en la piel, de ahí que también se le llame exantema viral.
¿Qué causa esta enfermedad?
Esta enfermedad comúnmente es causada por el virus Coxsackievirus o por el Enterovirus, y aunque se observa en cualquier grupo etario, es más frecuente en los niños pequeños, sobre todo menores de 5 años, y están más expuestos los que acuden a guarderías o prescolares por el contacto cercano y contínuo.
¿Qué síntomas produce esta enfermedad?
El síndrome boca-mano-pie por lo general desarrolla síntomas en un lapso de tres a seis días después del contacto con la persona enferma.
Inicialmente el paciente comienza con febrícula, es decir fiebre baja, dolor a nivel de la boca y por consiguiente pérdida del apetito. En el lapso de unas 48 horas comienzan a aparecer en la boca unas pequeñas ampollas o llagas, que luego se rompen y ulceran, posteriormente se observan estas mismas ampollas a nivel de las palmas de las manos y las plantas de los pies, de ahí el nombre de síndrome boca-mano-pie.
Aunque menos frecuente, también pueden observarse las ampollas en otras partes del cuerpo como: los glúteos, los brazos, las piernas y los genitales.
¿Cómo se trata ?
Por lo general el síndrome boca-mano-pie es una enfermedad autolimitada, con una evolución satisfactoria en alrededor de una semana.
No existe un tratamiento específico, salvo medidas generales, hidratación y tratamiento para los síntomas como la fiebre, en cuyo caso se recomienda un antipirético común.
Para las ampollas a nivel de la boca se recomienda que los alimentos sean en fase liquida o blandos, evitar que estén muy calientes, o sean muy salados o ácidos ya que pueden causar más dolor en la boca del paciente al momento de ingerirlos, por la presencia de las úlceras.
Y en general mantener un buen estado de higiene para evitar sobreinfección en el resto de las ampollas de la piel.
¿Cómo prevenir esta enfermedad?
Dado que es una enfermedad muy contagiosa para prevenir adquirirla hay que evitar el contacto con las secreciones (saliva, moco, secreción de las ampollas, heces, orina) de las personas enfermas, evitando compartir vasos, cucharas y otros utensilios de comer.
También evitar dar besos y con el lavado frecuente de las manos como medida universal. Haciendo énfasis en que el período de contagio es variable y puede durar incluso semanas después de la fase aguda.
