El hígado es prácticamente al igual que los riñones un filtro. Por él pasan durante todo el día muchos elementos que deben ser por decirlo así descifrados, decodificados o eliminados. Algunas personas comen demasiado y cualquier cantidad de cosas sin saber que por más bueno que sea nuestro hígado sufre y padece.
Por qué el hígado se llena de grasa
La comida chatarra en exceso puede dejar grasa en el hígado. El abuso al consumir ciertas medicinas y las bebidas artificiales también puede causar problemas al hígado. Cuando llega a cierto punto donde prácticamente está sucio, muchas de sus funciones se ven limitadas.
Los síntomas varían en cada persona.
En algunos la zona donde está ubicado el hígado, en la parte baja del abdomen presenta dolor. Es como una molestia que no te paraliza pero si causa incomodidad, sobre todo al caminar. En otros empiezan a aparecer manchas en la piel o hasta en el rostro. También hay personas que por más que se cepillan siempre tienen mal aliento. En otros produce fatiga y pérdida de peso.
Los síntomas ya descritos no determinan que tengamos el hígado sucio pero sí hay que acudir al médico. No es normal que nos duela la zona donde está el hígado. Los que beben alcohol deben tener más cuidado ya que hay otras enfermedades del hígado relacionadas con el consumo de alcohol. A nivel científico no se puede establecer de manera estricta que sea malo comer unas pocas veces a la semana dulces, pizzas o hamburguesas.
Lo que sí es cierto es que el hígado se ensucia si nunca lo desintoxicamos o depuramos.
El té de tamarindo elimina la grasa del hígado
Los jugos verdes ayudan a limpiar el hígado. Su efecto es más potente en ayuno. El pepino y otros vegetales tienen un efecto antioxidante. El tamarindo es rico en vitamina C, pero las hojas de este árbol en forma de infusión o té prácticamente limpian la grasa que pueda estar acumulada en el hígado y que impide que funcione bien.
Los médicos también recetan algunas cápsulas de aceite de omega para acelerar la recuperación del órgano. Beber mucha agua también ayuda a limpiarlo.
Otras maneras de limpiar el hígado
Hacer ejercicio con regularidad evitará que los órganos como el hígado se saturen de toxinas. Cuando sudamos eliminamos de nuestro cuerpo elementos dañinos.
Al hacer ejercicio aumentamos el consumo de agua lo que inmediatamente limpia nuestro cuerpo internamente. También al quemar calorías el cerebro se ve obligado a buscar dentro del mismo cuerpo elementos y compuestos que pudieran ser convertidos en energía y muchas veces de manera automática manda a limpiar la mayoría de nuestros órganos buscando alimentos, y uno de esos órganos que se limpiará será nuestro hígado.