Cuando se habla de #trastornos de la alimentación, inmediatamente se tiende a pensar en anorexia y bulimia, ya que estos son los que se presentan con una mayor frecuencia, sin darnos cuenta de la existencia de otros, incluso algunos más graves y serios. Aquí les hablaré de aquellos que tienen una mayor incidencia.

Los trastornos de la alimentación o conducta alimentaria (TCA) son enfermedades realmente graves donde existe una alteración significativa de la ingesta de alimentos, con peligrosas consecuencias para la salud.

Las reconocidas por las clasificaciones oficiales de trastornos mentales son: #Anorexia Nerviosa, #Bulimia Nerviosa, Trastorno por Atracón y los TCA no especificados (que no cumplen todos los criterios para un trastorno de la conducta alimentaria específico).

También existen otros trastornos subclínicos o menos graves y de menor intensidad y/o menor frecuencia de síntomas.

A pesar de que se manifiestan a través de un régimen alimenticio obsesivo, en realidad son condiciones complejas que surgen de la combinación de condicionamientos presentes en el individuo por largo tiempo, factores emocionales, psicológicos, biológicos, interpersonales y sociales que no son capaces de resolver y los mantienen en un estado de insatisfacción constante, por lo que utilizan la comida y el control de la comida como una forma de compensar los sentimientos y emociones que de otra manera no pueden controlar ni expresar.

CAUSAS

Aunque los #trastornos de alimentación pueden comenzar con preocupaciones por la comida y el peso, son mucho más que solamente una cuenta de calorías.

Para algunas personas, la dieta, comer en exceso y la purgación puede comenzar como una forma fácil de lidiar con emociones dolorosas e intensas que no pueden controlar, y así, sentir que dominan sus emociones, su cuerpo y su vida.

Determinados factores psicológicos predisponen a las personas a desarrollar #trastornos de alimentación.

Las familias o relaciones disfuncionales son un factor importante. La mayoría de las personas con trastornos de la alimentación, tienen baja autoestima, se sienten indefensas, abandonadas, vulnerables, y con una insatisfacción profunda por su apariencia e imagen corporal, aunque cada uno de los trastornos tiene sus características específicas.

Por ejemplo, las personas con #anorexia tienden a ser perfeccionistas, mientras que las personas con #bulimia tienden a accionar impulsivamente.

SÍNTOMAS

Los síntomas que se observan con mayor frecuencia en las personas que padecen de algún trastorno de la alimentación son:

  • Pérdida de peso acelerada.
  • Obsesión por las calorías, la grasa y el contenido nutricional de los alimentos.
  • Uso de píldoras para adelgazar, laxantes y diuréticos.
  • Atracones de comida.
  • Pérdida de cabello y problemas dentales.
  • Pérdida de conciencia o desmayos sin explicación.
  • Callos en los nudillos a causa del vómito forzado.
  • Negación de la pérdida de peso.
  • Debilidad corporal y mal aspecto de la piel.
  • Aislamiento social y agresividad.
  • Ingesta de alimentos más rápida de lo normal.
  • Ingesta de alimentos en soledad.

Las señales de advertencia más graves pueden ser las más difíciles de detectar, y esto se debe a que las personas que tienen un trastorno de la alimentación siempre tratan de mantenerlo en secreto.

TIPOS DE TRASTORNOS DE LA ALIMENTACIÓN:

  • BULIMIA NERVIOSA: esta se caracteriza por ingerir una gran cantidad de alimentos a la vez (atracones), y luego vomitar o tomar laxantes para eliminar o purgar la comida del cuerpo. En algunas ocasiones, después de un atracón, algunos bulímicos ayunan o hacen ejercicio en exceso para no aumentar de peso. Las personas que tienen #bulimia, por lo general, están cerca de su peso normal, aunque éste puede aumentar y disminuir constantemente.
  • ANOREXIA NERVIOSA: la #anorexia nerviosa causa en la persona que la padece una imagen distorsionada de su cuerpo que la hace ver un excedente de kilos aun estando por debajo de su peso normal, y por eso rechazan de manera casi absoluta los alimentos, llegando incluso a la inanición. La anorexia puede ser: Restrictiva, es decir, la persona come muy poco o deja de comer y se ejercita de manera excesiva; o Purgativa, donde la persona se purga vomitando, tomando diuréticos o laxantes, después de su mínima ingesta de alimentos.
  • ORTOREXIA: es uno de uno de los #trastornos de la alimentación más recientes. Es una obsesión patológica por ingerir comida considerada saludable que en realidad no lo es. Consiste en llevar una dieta aparentemente saludable llevada al extremo, y que acarrea serios problemas de desnutrición por basarse en un poco más de 10 alimentos. Consideran a la mayoría de los alimentos peligrosos por haber sufrido procesos industriales como llevar colorantes o aditivos.
  • TRASTORNO POR ATRACÓN: este se produce por una ingesta excesiva y compulsiva de alimentos, seguida de una fase de restricción alimentaria, en la que al bajar la energía vital, se vuelve a sentir la necesidad imperiosa de comer. Una vez que se inicia otro atracón, disminuye la ansiedad, el estado de ánimo mejora, y aunque el individuo es capaz de reconocer que el patrón alimenticio no es correcto, y le causa daño a su cuerpo y a su salud continúa con el mismo comportamiento.
  • PERMAREXIA: este trastorno no ha sido completamente aceptada como un trastornos de la alimentación. Hace referencia al trastorno que sufren las personas obsesionadas con el sobrepeso y que se someten a una permanente dieta baja en calorías, que si no se trata, puede llevar a la persona a sufrir de #anorexia o #bulimia. Estas personas siempre están a dieta sin importar su peso. En este trastorno “estar a dieta” es una rutina.
  • MEGAREXIA: es un trastorno opuesto a la #anorexia nerviosa. Quienes la padecen suelen ser personas obesas y desnutridas por falta de nutrientes esenciales en su alimentación, que se miran al espejo y se perciben delgadas y saludables; por eso no hacen ningún tipo de dieta y comen de todo en cantidades exageradas, sobre todo, azúcares, almidones, harinas, grasas, etc.
  • VIGOREXIA: aunque no ha sido reconocido oficialmente como un #trastorno de la alimentación, cada día lo padecen más personas obsesionadas con el físico, y con una visión distorsionada de su cuerpo (dismorfofobia). las personas que la padecen, llevan una dieta poco equilibrada con un consumo exagerado de proteínas y carbohidratos, mientras que la cantidad de lípidos se reduce. Esto puede ocasionar alteraciones metabólicas importantes, sobre todo cuando el vigoréxico consume esteroides. La vigorexia también se conoce como dismorfia muscular o “complejo de Adonis“.
  • EBRIOREXIA: también conocida como drunkorexia, consiste en restringir la ingesta de alimentos con el objetivo de poder ingerir bebidas alcohólicas, para contrarrestar las calorías de este y así evitar el aumento de peso. Las personas que la sufren se someten a un ayuno voluntario antes o después de comer en grandes cantidades, para posteriormente inducirse el vómito, luego de haber ingerido bebidas alcohólicas de forma desmedida.
  • DIABULIMIA: es un #trastorno de la alimentación que se da en personas insulinodependientes, que para perder peso, reducen u omiten las dosis de insulina que les corresponde para mantener un adecuado control glucémico. Si no se trata adecuadamente, esta conducta de omisión de insulina puede llegar a volverse crónica y tener fatales consecuencias para la persona afectada.
  • PICA: es uno de los trastornos de la alimentación más raros, ya que consiste en un deseo irresistible de comer o sustancias no nutritivas y poco usuales como tierra, tiza, yeso, virutas de la pintura, bicarbonato de sodio, almidón, pegamento, moho, cenizas de cigarrillo, papel o cualquier otra cosa que no tiene ningún valor alimenticio. Es un trastorno que suele estar acompañado de otras enfermedades mentales, aunque se ha encontrado también en niños con desnutrición severa e incluso en mujeres embarazadas.
  • SADOREXIA: es un trastorno de la alimentación poco conocido, y se presenta como una mezcla entre la #anorexia y el auto maltrato físico. Se autolesionan para acabar con la ansiedad por comer, llegando a una delgadez mayor que las personas que sufren de anorexia nerviosa, siendo considerado por los especialistas como el punto más extremo de la anorexia.
  • HIPERFAGIA: es un trastorno caracterizado por un aumento excesivo de la sensación de apetito, lo que provoca ingestas descontroladas de alimentos sin razón aparente. El deseo de comer es persistente y fluctuante, pudiendo llegar a ingerir grandes cantidades de comida a cualquier hora e incluso después de haber comido adecuadamente.

TRATAMIENTOS

Para combatir cualquier tipo de trastorno de la alimentación, es muy importante seguir un tratamiento centrado en la modificación de la conducta y del control de los impulsos.

El especialista debe buscar controlar la ansiedad, los conflictos interpersonales y revisar el estilo de vida del paciente.

El objetivo del tratamiento se debe basar en restaurar una nutrición adecuada, lograr un peso corporal saludable, reducir el exceso de ejercicio, frenar la comida en exceso y la inducción de vómitos.

Los planes de tratamiento estarán diseñados de acuerdo con las necesidades individuales de cada paciente. Se ha determinado que ciertas formas de psicoterapia, o terapia de conversación, incluyendo la terapia de familia y las estrategias cognitivas, han demostrado ser útiles en el tratamiento de algunos trastornos de la alimentación. Estas terapias ayudan a la persona a identificar patrones distorsionados, pensamientos negativos, y cambiar creencias imprecisas e incorrectas.

Una vez que el terapeuta ha identificado problemas importantes que requieren atención, y desarrollado un plan de tratamiento, ayuda al paciente a reemplazar los pensamientos y conductas destructivas por otras más positivas que lo ayuden a evolucionar. Sin embargo, simplemente cambiar los pensamientos y conductas del paciente no es suficiente.

Para garantizar una recuperación duradera, los médicos, psicoterapeutas, nutricionistas y pacientes deben trabajar juntos para explorar los problemas psicológicos subyacentes al trastorno de la alimentación para poder recuperar el control adecuado de sus conductas alimenticias y de su vida.

También es muy importante consultar a un nutricionista que ayude a evaluar y mejorar el consumo nutricional, buscando cambiar los malos hábitos alimenticios, sirviendo de guía para aprender a elegir los alimentos adecuados dentro de una dieta balanceada, y estableciendo la importancia de comer a horas regulares.

En algunos casos, los medicamentos, tales como los antidepresivos, antipsicóticos o estabilizadores del ánimo pueden ser útiles en el tratamiento de los trastornos de la alimentación y varias de las enfermedades coexistentes, como la ansiedad o la depresión.

Para el éxito del tratamiento, los pacientes deben querer cambiar y tener una familia y amigos que los apoyen y ayuden en el proceso.

Los #trastornos de la alimentación son enfermedades reales que se pueden tratar. Con frecuencia coexisten con otras enfermedades, tales como la depresión, el abuso de sustancias o el trastorno de ansiedad. Entre más temprano se diagnostique un trastorno de la alimentación, mejores y mayores oportunidades de recuperación existen.

Sólo un médico puede determinar qué tipo de trastorno de la alimentación padece la persona y descartar enfermedades, así como determinar si el paciente corre peligro físico inmediato. Algunos pacientes pueden requerir de hospitalización para tratar los problemas que causa la desnutrición o para asegurarse de que coman lo suficiente si tienen muy poco peso.

La recuperación completa con el tratamiento adecuado siempre es posible.