Desde hace meses, es imposible entrar en redes sociales (Facebook, Twitter, etc.) y no encontrarse con un anuncio sobre la famosa "Birchbox". Se trata de una e-commerce (comercio electrónico) que distribuye una selección de cosméticos mensualmente a sus abonados, formado por un público amplio y variado en todo el mundo.

"Birchbox" y su comercio en internet

Negocio fundado en 2010 por Katia Beauchamp y Hayley Barna, se sitúa como líder global del discovery commerce, caracterizado por la venta de productos de marcas reconocidas a través de un canal online.

En este caso, los usuarios crean su propio perfil a través de la página web, y tras abonarse, se les suministra mensualmente una caja de productos de belleza y cosméticos adaptados a sus gustos, edad o necesidades. Asimismo, cada caja tiene una temática distinta: la correspondiente al mes de abril ofrecía la opción de elegir una caja caracterizada en función de una serie de televisión, la caja de mayo respondía a la llegada del verano, etc. También es importante destacar que la compañía trata de encontrar productos denominados cruelty-free. Finalmente, incorporan un breve manual que recomienda las mejores formas de utilizar cada producto incluido, incluyendo trucos y consejos.

Además, Birchbox cuenta con una amplia tienda online de productos de belleza, ofreciendo un extenso programa de puntos, acumulables con las compras realizadas, opiniones sobre los productos o recomendaciones.

De esta forma, los usuarios disponen de muchos descuentos para realizar sus pedidos.

Primer tienda de "Birchbox" en Nueva York

No obstante, tras implantarse en los mercados de cinco países de manera excepcionalmente competitiva, y consolidar sus ventas ascendiendo al envío de 12 millones de cajas anualmente alrededor de todo el mundo, en 2014 la compañía tomó la decisión de establecerse en el comercio tradicional a través de la inauguración de la primera tienda de "Birchbox", situada en Soho, Nueva York, trasladando la "experiencia Birchbox" al mundo físico.

Tras consolidar su triunfo a pie de calle, este año han abierto su segunda tienda en París. Para implantarse en la capital europea de la cosmética, la compañía ha optado por un local inspirado en la comodidad hogareña, optando por colores pastel. En cualquier caso, París se constituye tan solo como la primera ciudad europea en la que Birchbox cuenta con una tienda física, pero ni de cerca la última.

Actualmente, la empresa está realizando pruebas en países como Reino Unido y, eventualmente, se calcula la apertura de una tienda en España a finales de este año.

Ahora bien, ¿podrá Birchbox triunfar estableciendo tiendas físicas o perderá su magia de discovery commerce?