Rafael Bengoa, uno de los mayores expertos en infecciones y que fue director de Sistemas de Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ex asesor de Barack Obama, ha puesto en guardia a la población española sobre cuál puede ser el próximo escenario sobre la evolución de la COVID-19 y si puede haber un confinamiento en el domicilio. Al manifestar, que si se mantienen los datos de contagios y fallecimientos que hay en estos momentos, “habrá un confinamiento en las próximas semanas en todas las comunidades autónomas de España”.

Al mismo tiempo, el asesor del anterior presidente de los Estados Unidos pone de manifiesto que el gobierno de Pedro Sánchez debería haber implantado una serie de medidas más duras con cierta anticipación.

Sus perspectivas para que se implante el confinamiento en el domicilio es que se hará en realidad en torno a una o dos semanas. Es decir, antes del 15 de noviembre y a algo más de un mes para la llegada de la Navidad. Tal y como ha apuntado Fernando Simón.

Habrá que volver al confinamiento de primavera

Durante su entrevista en El Suplement de Catalunya Ràdio, Rafael Bengoa incide en que ya no hay tiempo para tomar medidas más laxas para combatir este virus en las vías respiratorias. Es de la opinión que con las actuales medidas que se han tomado, tanto a nivel nacional como autonómico, no se ha podido reducir el nivel de contagios, enmarcadas dentro del actual estado de alarma. Ante este escenario tan preocupante, cree que el siguiente paso a tomar es “un confinamiento parecido como el que se llevó a cabo en los meses de marzo y abril”, en donde las restricciones y la movilidad fueron máximas para toda la población española.

Poco optimista respecto a la Navidad

El director de Sistemas de Salud de la Organización Mundial de la Salud, por otra parte, ofrece unas perspectivas para pasar la próxima Navidad muy poco halagüeñas para los ciudadanos. No en vano, apunta a que “unas fiestas normales supondrían un enorme foco de infección respecto a los contagios”.

En este sentido, no estima que haya una cierta normalidad en estos días tan especiales del año, sino que por el contrario, se deberá “doblegar la curva” ante el posible colapso del sistema sanitario español. Para ello lo que se habría impuesto serían confinamientos locales.

Un confinamiento en torno a 30 días

En otro orden de cosas, Rafael Bengoa es partidario de que el nuevo confinamiento para aplacar al Coronavirus debería tener una duración de un mes aproximadamente.

Aunque matiza que en este escenario se debería procurar que las escuelas se mantuviesen abiertas. Al igual que sucede en otros países de nuestro entorno, como por ejemplo en Francia o Alemania. "En países como Irlanda e Israel los nuevos confinamientos de entre tres y cuatro semanas han funcionado bastante bien”, argumenta este experto en Enfermedades víricas. Aunque reconociendo que se llegue un poco tarde a las mismas y este factor puede dificultar la contención de la COVID-19.