La pretensión del Gobierno, encabezada en esta ocasión por Podemos, para modificar la vigente ley del aborto, permitiendo que las menores de 16 años puedan abortar sin consentimiento paterno, ha provocado un intenso debate en el Congreso entre la Ministra de Igualdad, Irene Montero, y la diputada de VOX, Lourdes Méndez, además de la diputada del PP, Marga Prohens, que ha afeado a la ministra que calle ante las acusaciones hoy anunciadas por el juez contra el vicepresidente del gobierno, Pablo Iglesias.
Reproches de la ministra Irene Montero
El debate ha subido bastante de tono, lo que ha llevado a la ministra a lanzar varias puyas del estilo: “Para una persona feminista, ser Mujer significa más riesgo de pobreza, más riesgo de exclusión social, más riesgo de sufrir violencias, más riesgo de cobrar menos por el mismo trabajo... ¿Qué es para ustedes ser mujer?”, con la respuesta de que no es la ministra ni su partido quienes dictan lo que es o no una mujer.
El debate ha ido por otros derroteros como la violencia de genero, ante lo cual, la Ministra de Igualdad ha defendido el plan del Gobierno para atajar dicha violencia con modificaciones legales que protejan y castiguen expresamente los delitos de malos tratos en el hogar y la violencia del hombre contra la mujer: “Plan España, te protege contra la violencia machista e implicará incrementar los servicios de asistencia telefónica y digital a las víctimas, los dispositivos de control telemático de agresores y la construcción de cincuenta centros de atención integral, entre otras medidas".
La respuesta de la diputada de VOX se ha basado en que al poner exclusivamente el acento en la violencia contra la mujer el "feminismo radical" se olvida de otras violencias como la que sufren los niños, declarando que según las últimas estadísticas es la violencia contra los niños en el entorno doméstico la más grave y numerosa en los últimos tiempos: "¡Por qué estos progres se empeñan en no proteger a todas las personas que están siendo víctimas de delitos!".
Debate encendido en otros temas entre Irene Montero y la diputada de Vox
Con todo, el aborto fue el tema central de la intervención y en ese aspecto la ministra Montero se mostró bastante orgullosa en lo que la modificación de la ley del aborto se refiere, recurriendo a argumentos que el feminismo militante ha empleado a menudo: "Nuestros cuerpos son nuestros, nosotras decidimos.
Reivindicamos, como tantas voces verdes y moradas en todos los rincones del mundo, el derecho de todas las mujeres a decidir sobre sus cuerpos y reivindicamos una maternidad libremente decidida y sobre todo una vida sexual plena y libre".
La diputada Méndez se acogió al argumento del trauma existencial que supone un aborto y anunció la oposición su partido a la modificación de la actual ley: "Sólo saben hablar de muerte. Mientras, en Vox seguiremos defendiendo la vida del no nacido y la protección de la mujer embarazada".
La gestión de la crisis del coronavirus también entró en la palestra aduciendo la diputada de Vox que la manifestación del 8-M fue "una bomba vírica" cuando ya al gobierno se le habían enviado todas las alarmas por la virulencia del COVID-19, un argumento que desde luego se repite continuamente en cada debate que se inicia acerca de la propagación del virus y que emplea de manera sistemática la oposición.
En definitiva, un debate acalorado y recalcitrante que no deja de poner en evidencia la brecha y disparidad de ideas, muchas usadas repetidamente, que actualmente existe entre estos dos partidos políticos, cada uno colocado en la antítesis del otro y que muestra el amargo y crispado panorama político español del presente.