Kim Yo-jong nació en Pyongyang en 1987 y fue educada en Suiza, junto a su hermano. Es la única hija del presidente, fruto de su amor con una bailarina japonesa y se la considera la mujer mas influyente del régimen norcoreano. Fría y calculadora se la conoce como “La Princesa” y aunque nunca ha formado parte de ejecuciones, conoce su funcionamiento llegando a utilizar su influencia para castigos menores.

Incesantes rumores sobre el estado de salud de Kim Jong-un

Aunque el presidente Trump y miembros del partido Comunista de España, como Cao de Benós, han tachado los rumores como "fakenews", el senador Lindsey Graham ha manifestado que “no le sorprendería que el mandatario norcoreano estuviera incapacitado”.

El rumor saltó internacionalmente a través del medio estadounidense TMZ, que se hizo eco de una información de la Televisión de Hong Kong HKSTV, cuya vicedirectora, Shijian Xingzou, aseguró saber de fuentes muy fiables, en la red social China, Weibo que el norcoreano ya estaba muerto. La web española Maldita, está desmontando algún fotomontaje, pero afirman no poder corroborar la noticia, dada la opacidad del país asiático.

Asimismo, las imágenes por satélite publicadas por 38 North, sitio especializado en Corea, revelan que el tren blindado donde viaja el dictador se encuentra en Wonsan, zona costera donde se reúne la élite. Aunque esto solo indicaría que no se encuentra en la capital. Fuentes de Seúl señalan no haber actividad inusual de tropas.

El poder alcanzado por 'La Princesa'

Kim Yo-jong regresó de Suiza en 2001, junto a su hermano Kim-jong-un. Terminaron sus estudios en la Universidad de Pyongyang, estuvo al lado de su hermano en 2011 en el funeral de su padre, pero en un segundo plano. En 2012 es nombrada miembro del Comité de Defensa, siendo designada para ejercer el poder en caso de incapacidad del líder supremo.

En 2015 fue nombrada a cargo del Departamento de Propaganda y Agitación de Corea del Norte, a partir de ahí toma la labor de manager del dictador, función que desempeñaba su tía Kim Kyong-hui con su padre. Se dedicó en exclusiva a la proyección de la imagen de su hermano en el exterior, organizando la visita de Dennis Rodman, entre otros famosos y en el interior fomentando la imagen de un líder cercano al pueblo, comprometido con la tradiciones y la modernidad.

Su ascensión a la élite política se fraguó en 2017, siendo nombrada miembro suplente del politburó del Partido de los Trabajadores, convirtiéndose en la segunda mujer después de su tía en ocupar dicho puesto del Gobierno. En ese momento EEUU la acusó de abusos contra los derechos humanos.

Internacionalmente se dio a conocer con los Juegos Olímpicos de Pieonchang en 2018, siendo el primer representante del Gobierno norcoreano en visitar el sur después de la guerra. Ha estado presente en las reuniones con Trump, Xi Jinping y Putin. Desde entonces, actúa como representante de Kim Jong-un por Corea del norte. Se puede decir que es su mano derecha.

Corea del Norte es un país con fuerte tradición patriarcal

El papel desempeñado por Kim Yo-jong a lo largo de su vida política ha sido muy influyente, solo a la altura de muy poca gente en Corea del Norte. Conoce muy bien el funcionamiento del estado y la metodología de los conflctos internos. Tal vez, es la más preparada para ejercer el poder, en un momento delicado con una fuerte imagen de autoridad.

Como indica Lim Jae-cheon, experta en la dinastía Kim de la Universidad de Corea en Seúl, “ella no puede ser líder, es una mujer”, o como declara Leonid Petrov, especialista en Corea del Norte y profesor en el International College of Management en Sydney “Corea del Norte es un país confuciano, donde se respeta la antigüedad y la masculinidad”.

Tal vez solo ejerza el poder como regente, hasta la mayoría de edad de los hijos de Kim Jong-un. Si los rumores se confirman el mundo podría ser testigo del ascenso de la primera mujer dictador de la historia moderna.