La última semana ha conseguido reabrir el debate sobre los ultras, el radicalismo y la permisividad de la que gozan en la mayoría de deportes. Concretamente, el fútbol es uno de los deportes en el que los extremistas tienen una mayor libertad a la hora de viajar con las aficiones de los equipos, para poder entrar a los estadios libres de controles de seguridad y para armar un descontrol que nadie es capaz de eliminar. El último de los problemas con los radicales relacionados con el fútbol ocurrió esta semana en los aledaños del estadio del Athletic de Bilbao, después de que las dos aficiones se enzarzaran en una trifulca que duró hasta el comienzo del encuentro.

El resultado fue muy trágico, ya que no sólo hubo grandes destrozos en las calles de la ciudad vasca, sino que un Policía de la Ertzaintza, la autoridad autonómica del País Vasco, falleció por un ataque al corazón después de tener que enfrentarse a los ultras rusos del Spartak de Moscú.

Qué pasó entre las aficiones del Athletic y del Spartak de Moscú

Para comprender el porqué de los incidentes ocurridos el pasado jueves, hay que saber qué pasó entre las aficiones del conjunto vasco y ruso. En la noche del jueves, los radicales del Athletic de Bilbao y del Spartak de Moscú se citaron momentos antes del partido de la Europa League que les enfrentaba, para disputar una violenta batalla que se saldó con un muerto y varios heridos.

Los agentes del Athletic de Bilbao se vieron acorralados en medio de una nube de bengalas rojas, que les impedía ver correctamente, y que hizo que los radicales tuvieran ventaja frente a los agente municipales.

Fue hace seis años cuando el Gobierno vasco decidió prohibir la utilización de pelotas de goma, después del fallecimiento de un aficionado del Athletic de Bilbao durante un encuentro de competición europa por un lanzamiento con este tipo de protección.

A raíz de ese momento, los policías de la Ertzaintza declararon hace seis años que habían sido condenados a su suerte, ya que la protección que ahora pueden usar durante este tipo de "batallas campales" es demasiado poco contundente y es la disputa en el cuerpo a cuerpo lo único que les permite defenderse de los bárbaros del mundo del fútbol.

La policía, enfrentada con al Departamento de Seguridad

Seis años después del último enfrentamiento entre el Departamento de Seguridad y la Ertzaintza, las disputas entre ambos cuerpos vuelven a estar presentes por el fallecimiento de un policía. La muerte de Inocencio Alonso ha provocado una mayor indignación del cuerpo, después de que lleven reclamando una mejora de las condiciones de trabajo, ya que las que tienen actualmente, según los propios agentes, dejan mucho que desear.

La muerte de Inocencio Alonso, muy presente en la Ertzaintza

Según la Consejería de Seguridad, dirigida por Estefanía Beltrán de Heredia, relató cómo se produjo el fallecimiento del malogrado policía

. En palabras de la propia consejera, el Ertzaintza se encontraba en mal estado cuando tuvo que bajarse de la furgoneta para aplacar los ánimos de los radicales.

Fue entonces cuando el policía sufrió un desmayo, una ambulancia acudió al lugar de los hechos para tratar de salvar la vida de Alonso, pero lo único que pudieron hacer fue confirmar la muerte del agente.

Los altos dirigentes de la Ertzaintza

explicaron también a los medios que la causa de la muerte de Inocencio Alonso no se conoce del todo, ya que tendremos que esperar varios días para conocer los resultados de la autopsia que certifique cuál fue la causa oficial del fallecimiento. Los policías ya organizan nuevas manifestaciones para reclamar más derechos y más protección ante estas situaciones.