Las madrastras de todo el mundo se enfrentan a muchos desafíos únicos con sus familias reconstituidas. Si está lidiando con el mismo dilema que una madrastra, probablemente estés pensando en cómo lidiar con los problemas de la familia y cómo puede ser una madrastra exitosa e inteligente.
Crear confianza y un fuerte vínculo con los Niños es inevitablemente crucial. No puedes esperar que ellos u otros miembros de la familia te muestren amor y afecto en un instante. A veces puede llevar meses e incluso años antes de que puedan llevarse bien.
Afortunadamente, este tipo de situación se pueden solucionar y las madrastras pueden desarrollar una relación cercana con sus hijastros casi siempre.
Ser una madrastra inteligente no significa necesariamente que tengas que competir con la madre de los niños y ganarlos o dirigirlos a tus estrictas reglas de la casa y presionarlos para que cumplan con todo. Eso no funcionará. Tienes que optar por una mejor forma en que puedas manejar las situaciones desafiantes en la familia.
Este artículo te guiará con las formas efectivas en que puedes manejar el rol de madrastra:
Construyendo una relación con los niños
No puedes esperar que el hijo de tu cónyuge se sienta cómodo contigo de inmediato. Aunque en algunas familias esto puede suceder fácilmente, debes comprender el hecho de que podría ser difícil para el niño aceptar toda la nueva configuración de la familia: tenerte como una madrastra.
Como dijo el psicólogo William Merkel, las familias reconstituidas se consideran "las relaciones humanas más complejas, antinaturales y difíciles conocidas por la humanidad".
Desde el punto de vista del niño, la situación puede ser dificil de asimilar. Puede parecer muy fácil decir cuánto amor y cuidado estás dispuesta al niño.
Pero no caigas en la gran esperanza de que el niño o los niños correspondan a tus esfuerzos y se adapten rápidamente a la situación. En algunos casos, un hijastro puede pensar que eres una intrusa, una extraña y no un miembro de la familia.
Lo que puedes hacer
No insistas ni exijas al niño a que te llame "mamá"
Llegará el momento y sabrás cuándo el niño esté listo para llegar a ese punto (aunque puede que nunca lo haga).
Tampoco es bueno ni asertivo que te refieras a ti mismo como parte de la familia. Aunque técnicamente, es asi, el niño puede no sentirse cómodo con las palabras "somos una familia" o "ahora soy de la familia”.
No trabajes demasiado para complacer a tu hijastro
Haz que se sienta cómodo contigo. Muestra tu genuina preocupación por comprender los sentimientos del niño, incluso cuando parezca distante. Si quiere ir a una charla, no actúes como si fuera una madre con algún tipo de autoridad y el niño esté obligado a contarte todo. Sé comprensivo y cálido con él.