Casi la mitad del total de trabajadores en los Estados Unidos trabaja durante 48 horas o más por semana, mientras que más del 7 por ciento de ellos trabaja durante más de 60 horas, con o sin pago de horas extras. Hay muchas razones por las cuales estas personas prestan servicios más allá de las horas normales de trabajo requeridas. Algunos podrían estar buscando una promoción, con el objetivo de recibir una compensación adicional, responder a la carga de trabajo masiva que se debe hacer antes de la fecha límite y por otras razones personales. Sin embargo, varios trabajos de investigación, en relación con la experiencia real, revelan que hacer horas extra es contraproducente para las personas, su desempeño y los resultados finales que eventualmente afectan a las empresas para las que están trabajando.

Las horas extras causa problemas de salud

Según varios estudios encabezados por Marianna Virtanen del Instituto Finlandés de Salud Ocupacional Salud, el estrés causado por trabajar más de las horas de trabajo normales podría provocar problemas de salud de todo tipo. Aparte de los habituales trastornos del sueño causados por la privación del sueño, las horas extraordinarias podrían conducir a la depresión, enfermedades del corazón, problemas de memoria, la diabetes y otras enfermedades. Por lo tanto, trabajar horas extras no tiene sentido, especialmente para las personas que aspiran a ahorrar más de su dinero, ya que su salud estará básicamente en riesgo.

El tiempo extra hace que los empleados sean menos productivos

El objetivo principal de hacer que las horas extraordinarias funcionen (aparte de la compensación) es realizar y realizar más tareas. Sin embargo, una investigación realizada por John Pencavel de la Universidad de Stanford confirmó que trabajar horas extras no aumenta la productividad de los empleados en comparación con aquellos que solo permanecen en la oficina durante las horas de trabajo habituales.

El trabajo de horas extras es también una de las razones del frecuente ausentismo y la resignación de los empleados. Se fomentó que la productividad de los empleados no debe medirse por el número total de horas trabajadas, sino por la forma en que se realiza el trabajo específico. Por lo tanto, se alienta a las empresas a centrarse simplemente en los métodos sobre cómo se hace el trabajo, y no en cuánto tiempo trabajaron los empleados para la empresa durante el día.

Trabajar horas extra puede aumentar el riesgo en términos de seguridad

Las investigaciones realizadas en Alemania descubrieron que los trabajadores que hacen horas extraordinarias tienen más probabilidades de estar vinculados a un mayor riesgo de accidentes de vehículos, ya que tienden a estar más cansados ​​y menos cautelosos al conducir. Los conductores que están cansados ​​del trabajo ejecutan un patrón intermitente de conducción y maniobras arriesgadas que probablemente conducen a accidentes. También tienden a estar menos enfocados en la conducción, lo que los hace más vulnerables a las colisiones en las carreteras.