A cuentagotas, así son los cambios que están marcando una profunda transformación en Arabia Saudí. Se trata de pequeñas medidas que prometen provocar una revolución en una sociedad que día a día, conoce nuevas libertades y experiencias. La más reciente, la apertura de salas de Cine improvisadas y la proyección de una película de dibujos animados. Una actividad que en otros países está totalmente naturalizada, pero que en Arabia Saudí, estaba prohibida desde los años 80. Lo cierto es que detrás de esa noticia, se encuentra un ambicioso programa de reformas, cuyo objetivo es redefinir la imagen del país.
Un marco que resulta atractivo y que, a su vez, supone una oportunidad para España de insertarse en un nuevo mercado.
Por primera vez en 35 años, los saudíes tuvieron la oportunidad de ir al cine a disfrutar de una película. Hasta el momento, se realizaron proyecciones en salas improvisadas, aunque se espera la apertura de más de 300 cines y 2.000 salas de acá al 2030. Más allá del impacto social de la noticia, la medida está acompañada por un fuerte programa económico. Bajo el nombre ‘Visión 2030’, el príncipe heredero Mohamed bin Salmán (MBS), promete desplegar un programa de modernización del país. Uno de los pilares fundamentales de dicho proyecto es la determinación de convertir a Arabia Saudí en una fuente de inversión global.
Lo que le permitiría al país, estimular la economía y a la vez, diversificar los ingresos. En resumen, una de las ambiciones principales de MBS es ponerle fin a la dependencia del petróleo, a la que él mismo calificó como una “adicción”.
Profundas reformas sociales
Si bien las reformas económicas representan un papel fundamental en la llamada ‘Visión 2030’, también se aspira a generar cambios estructurales en la sociedad saudí.
La apertura de salas de cine, es una medida menor, comparada con la serie de restricciones hacia la mujer que fueron levantadas en el último tiempo. La llegada de una mujer a la dirección de la Bolsa; el fin de la prohibición que les impedía a las mujeres manejar; entre otras, generaron una gran esperanza. Sin dudas, todavía queda mucho por hacer en términos de igualdad de género, pero por el momento, las Mujeres festejan cada paso nuevo que pueden dar en libertad.
Así lo demostraron aquellas que pudieron presenciar por primera vez, un partido en un estadio, o aquellas que con emoción, pudieron disfrutar de una exhibición de automóviles.
La ampliación de las libertades de las mujeres es vista como un verdadero triunfo. Lo cierto es que es un avance, pero no una victoria. Detrás de estas medidas, se encuentra también un beneficio económico. La inclusión de las mujeres, representa una manera de incorporar un nuevo actor al sistema económico, que permitirá generar nuevos ingresos de sectores que hasta el momento eran improductivos. Lo mismo sucede con la industria del cine. Se estima que el sector contribuirá con 90.000 millones de riales, equivalentes a unos 24 millones de dólares al PIB.
A su vez, se espera que esto resulte en la creación de aproximadamente 30.000 puestos de trabajos permanentes y otros 130.000 temporales, de acá al 2030.
Arabia Saudí está realizando un gran cambio de perspectiva. Poniendo un foco en las generaciones más jóvenes, se ha decidido priorizar los deseos insatisfechos de la población. En esa línea, se decidió darle un mayor fomento a los proyectos culturales, como así también darle un impulso al ocio y al turismo. Para eso, se creó la Autoridad General de Entretenimiento, que nuclea todos los proyectos destinados a la promoción del ocio y de la cultura. Además, días atrás, la comisión de turismo anunció el fin de la prohibición que impedía que las mujeres pudieran viajar solas, es decir, sin estar acompañadas por un hombre.
Oportunidades para España
En ese contexto, mientras Arabia Saudí intenta reestructurarse, España asoma cuidadosamente, en busca de posibilidades. El año pasado, la empresa española Timrural, firmó un preacuerdo con las autoridades saudíes para fomentar el turismo en la provincia arábiga. De esta manera, el conocimiento español del sector turístico se insertará en un sector con alto potencial en Arabia Saudí. Frente al avance del país árabe hacia la exploración de nuevos mercados, surgen nuevas oportunidades de inversión para España. Algo que ya se pudo ver, a principios de este año cuando el consorcio español instaló el tren de alta velocidad AVE, en el desierto saudí.
La sociedad saudí empieza a despertarse.
A cuentagotas, los primeros cambios están comenzando a surtir efecto. Podría decirse que la estrategia de bin Salmán está funcionando, aunque aún queda un largo camino por recorrer. La ‘Visión 2030’, busca convertirse en un plan revolucionario, aunque está apoyado sobre una larga cadena de promesas. No será fácil, pero en caso de lograrse, resultaría un ejemplo para la región. Habrá que conformarse con las medidas que vayan apareciendo, y esperar que el 2030 marque la conclusión de las promesas, y no se convierta en un ideal inalcanzable.