La Semana Santa es uno de los eventos más esperados por los españoles. Si bien es una festividad de la religión cristiana, en la que se conmemora la muerte y resurrección de Jesucristo, la Semana Santa se ha convertido en una fiesta en el calendario de religiosos y ateos. Es, además uno de los atractivos turísticos que caracterizan nuestro país.

¿Qué es la Semana Santa?

La Semana Santa consiste en una serie de procesiones, a lo largo de dicha semana, que según el año será durante el mes de marzo o el mes de abril.

Las procesiones recrean la Pasión de Cristo, desde que fue condenado hasta que resucitó, según cuenta la Biblia. Las procesiones son frecuentemente acompañadas por bandas de música, y otras agrupaciones que conforman las distintas cofradías locales. Creyentes en la religión cristiana y no tan creyentes son espectadores de estas celebraciones, muchos viajan especialmente para ver pasar los pasos de Semana Santa. ¿Qué tiene de especial esta semana que tanto atrae a la gente, además de aquellos que participan en dicha tradición como manifestación de su fe?

La Semana Santa es un arte

Aunque muchos no lo consideren así, las procesiones de Semana Santa son un arte.

Una muestra de lo tétrico que surge en el barroco español. La combinación de magníficas esculturas, muchas de ellas conservadas de varios siglos, con la emocionante música sacra tocada en directo con instrumentos de viento, al paso de los tambores y los redobles de caja, retumbando el eco de las cornetas. Esta combinación unida a la gran participación humana de costaleros que levantan las imágenes y las balancean al compás de la música, mientras miles de personas miran impresionadas y emocionadas desde balcones o desde la propia calle. De nuevo un Arte que transmite sentimientos y emociones nos cuenta una historia, la historia de alguien que murió, siendo condenado injustamente; de una persona que cargó con la cruz en la que sería crucificado, para después resucitar.

A pesar de tratarse de una historia ficticia, o no tan ficticia, es una historia que nos dice algo, nos conmueve y si la entendemos, nos hace pensar, igual que lo haría cualquier otra obra de teatro. La principal diferencia es que esta obra se realiza en la calle. La misma obra se representa de forma diferente en muchas de las ciudades españolas, todas nos narran lo mismo con diferentes escenas, pero lo que es cierto es que la misma obra de teatro es capaz de agrupar a miles de personas en la calle, unidos por la cultura y por una tradición histórica que en pleno siglo XXI es capaz de producir lágrimas de emoción en muchas personas y es capaz de poner los pelos de punta a cualquier persona con sentimientos.

La Semana Santa forma parte de nuestra economía

Por otra parte la Semana Santa podría considerarse como un negocio. Todos los años miles de españoles aprovechan esta semana para salir de casa y hacer algo de turismo, algo diferente como ir a la playa, a la montaña, salir del país o simplemente ir a ver las procesiones, ya que en esta semana en la mayoría de los centros educativos y en algunos trabajos se realizan unas pequeñas vacaciones, por lo que muchas familias aprovechan para descansar y desconectar. Del mismo modo, miles de turistas extranjeros entran en el país esa semana, para vivir en primera persona la tradición española. Todo este movimiento turístico supone un gran auge del sector, que si en España ya es demasiado bueno, por ser este un país donde el turismo es elevado, en estos días se multiplica.

Muchos bares, restaurantes, hoteles y otros establecimientos, además del sector de transportes, se ven altamente beneficiados con la presencia de la Semana Santa. Esto se traduce en un gran beneficio para la Economía de nuestro país. En el pasado año 2017, la tasa de empleo, aumentó cerca de un 10% gracias al turismo en Semana Santa.

Por las razones anteriores, la Semana Santa nunca debe desaparecer. Solo una sociedad respetuosa con las tradiciones y la cultura, es capaz de mantener año tras año un acontecimiento tan especial como lo es la semana más esperada por todos los españoles, por muchos files a la religión cristiana, o simplemente por muchos fieles a la belleza. Solo un pueblo inteligente es responsable de mantener un evento que tanto beneficio nos deja a todos.