Corría el año 1959 cuando apenas contaba con 19 años Armando Regusci presentó su primer invento que fue conocido como Hidrosvol, era un automóvil que se manejaba con un solo pedal, movido a través de transmisión hidrostática, con un volante o disco de inercia, el mismo recuperada la energía en la frenada y permitir mantener siempre el motor acelerado a fondo lo que acumulaba energía en el volante, de esa forma era en las carreras imbatible.
En una segunda etapa realizó cambios otorgando más velocidad al volante, logrando recorrer 100 kilómetros con energía cinética y sin motor.
El infatigable genio de Armando lo empuja a seguir investigando, es así como comienza a estudiar el uso del aire comprimido en vehículos, es así como en el año de 1986 crea un motor de aire comprimido bautizado Regusci , de pistón libre.
En medio de ello patentó sistemas varios para la compresión de aire. Este profesor de Física Matemática Tecnología y ciencias de la naturaleza es también mecánico además de ser bachiller en ingeniería del cual quizás que la vena de inventor tenga que ver con invento Hidrosvol, de hecho ese prototipo existe hasta el día de hoy y por supuesto, funciona. El mismo su tatarabuelo, el inventor de la pila eléctrica, Alejandro Volta.
En el año 1986 patenta finalmente el prototipo llamado como fue conocido su primer consta con un chasis de metro y medio de diámetro, al que Don Armando llamó giróscopo, era o es aún tensado por un motor eléctrico así entonces la energía liberada a través del disco y al destensarse hacía que el automóvil se desplazara, con apenas algo de electricidad previa a su salida ya el coche estaba listo para funcionar,
Infatigable en la creación de nuevos usos del aire comprimido para su aprovechamiento en los vehículos, ha continuado patentando más inventos, uno de ellos aprovechar al máximo la eficiencia del aire comprimido y así aumentar su autonomía.
Regusci al hablar de su invento lo hace siempre desde el entusiasmo y del pleno convencimiento que funciona y es totalmente viable, el vehículo a aire comprimido consiste en un pistón y una rueda libre, en resumen un cilindro de apreciable longitud para su diámetro y un pistón conectado a un eje, así que al inyectarle presión, empuja el pistón que va unido a una cadena y está provoca que gire la rueda libre.
Explica además que cada unidad debe contar con uno o más tanques con compresor para el almacenamiento del aire, es así entonces como el mecanismo de transformación física que el motor ejerce al comprimir y descomprimir el aire es completamente limpio, ya que no emite ningún tipo de gas o sustancia contaminante que afecte negativamente al medioambiente.
Destaca además que el aire en el coche es utilizado para el limpiaparabrisas del coche, subir o bajar los cristales, equilibrar la presión de los neumáticos, alimentación de frenado, suspensión… sin contar que en verano la climatización sería ecológica, rápida y sin motores, nuevamente.
Por si fuera poco y como solemos estar acostumbrados en Sudamérica, los coches normales pueden ser adaptados a este nuevo sistema de aire comprimido, con un único inconveniente poco importante para Uruguay. El echo que los coches adaptados tendrán como velocidad máxima los 120 kilómetros por hora.
Todos los detalles que yo pueda dar es poco, este inventor cuenta todo en su página Web, solo busca por su nombre, Armando Regusci, podrás ver varios vídeos, desde el primero que conduce el Hidrosvol a otros donde prueban la autonomía de una moto, o de otros coches que le siguieron al primer invento.
Más de uno se preguntará porqué no ha triunfado en sus proyectos, la primera respuesta es obvia, la compañía francesa Renault formó una empresa con Regusci y construyeron un prototipo que funcionó pero luego la empresa se disolvió por falta de aportes de capital que financiaran la construcción en cadena de esos coches. Curiosamente es una empresa francesa la que ahora ha fabricado un automóvil con el patrocinio del fabricante de coches hindú, TATA, Guy Negre, el francés que vendió su patente a esta empresa que ya fabrica los mismos.
Mientras por allí, por el Río de la Plata, un ya veterano ingeniero sigue soñando e inventando, la mala suerte quiso que la vida no le diese oportunidades, que los grandes capitales no apoyaran sus inventos, puede que empujados por grandes intereses, el caso es que algún día alguien además de este servidor dará a conocer al mundo el origen el automóvil que se desplaza a aire comprimido y ojala que allí de donde pueda estar don Armando contemple cómo el mundo reconoce sus inventos.
Admiro y apoyo siempre a todos aquellos que a lo largo y ancho del mundo dedican su vida al aprovechamiento de energías limpias, de energías renovables, que cuidan nuestro planeta, por ello hoy mis letras van dedicadas de Armando Regusci, el inventor uruguayo.