El domingo pasado, el pueblo polaco volvió a las urnas para elegir a los representantes del Parlamento. La afluencia a las urnas fue del 61%, un récord, superado solo en el 1989 donde se alcanzó un porcentaje de voto del 62%.
A ganar fue el partido de ultraderecha ‘Ley y Justicia’ (PiS) con una larga mayoría de votos. La presencia de parlamentarios de este partido será de 235 sobre 460, una mayoría considerable que gobernará el país por otros cuatro años.
El partido principal de la oposición será Coalición Cívica (Ko), partido centrista con 134 diputados.
La propaganda anti LGTB ha llevado al poder a 'Ley y Justicia'
La propaganda del PiS fue ampliamente criticada por parte de la oposición, ya que se centró en el nacionalismo y el odio hacia la comunidad LGTB. De hecho, los representantes del partido de ultraderecha polaco definieron los derechos de los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales como una influencia invasiva llegada directamente desde la Europa liberal que amenazará la identidad nacional de Polonia y de sus ciudadanos.
La posición del partido hacia los derechos humanos y de las personas LGTB fueron utilizados para criticar el fuerte liberalismo de los países occidentales hacia a estas temáticas, considerado como un riesgo para los valores cristianos sobre los cuales se basaría la política del ‘PiS’. Estas graves críticas fueron siempre el punto de fuerza de la extrema derecha polaca que, a través de estas campañas, fueron ganando siempre más aprobación en los últimos años.
Durante la campaña electoral, el viceministro de digitalización Andrzej Andruszkiewicz, considerado muy cercano a las posiciones de partidos de ultraderechas, escribió en su cuenta de Twitter “Salvamos Polonia... Es hora de completar la descomunalización. Es hora de detener la dictadura LGTB”. Consideraciones parecidas, perjudican gravemente a la percepción social de temáticas importantes como la extensión de los derechos hacia las minorías. Sin embargo, son muchos los partidos europeos que fomentan el odio racial u homofóbico para ganar votos en las elecciones, aprovechándose del clima inestable que caracteriza Europa en esta temporada.
Los soportes económicos hacia a las familias, con 100 euros de ayuda para cada hijo menor de 18 años, junto al crecimiento económico que vivió el país en los últimos años, fueron un empuje hacia a esta victoria.
Las consecuencias del voto pueden ser un incremento de la ultraderecha en Europa
Esta vez, el partido ganador obtuvo un resultado mejor en comparación a la pasada legislatura, cuando obtuvo el 37,6% de votos, comparado con este año (43%). Kaczynski, líder del partido, declaró en frente de los medios de comunicación de que su partido se merecía este resultado y más todavía deberían haber alcanzado.
Según el periódico ‘Madrid Press’, este evento podría crear algunos cambios también a nivel europeo. Estas elecciones podrían empujar ulteriormente los partidos populistas que luchan para cerrar las fronteras hacia la inmigración masiva que varios países de Europa están viviendo en los últimos años.