El pasado sábado 7 de julio, la iglesia católica argentina celebró una eucaristía en el santuario de la Virgen de Luján, en señal de desacuerdo con la legalización del aborto que se discute actualmente en el Congreso. Cabe destacar, que dicho santuario, es el escenario religioso más importante del país.
Discusión de la ley de despenalización del aborto
Hace unos meses atrás, el mandatario argentino, Mauricio Macri, impulsó la discusión del tema de la legalización del aborto en el Congreso. Y el pasado 14 de junio, luego de 21 horas de un intenso y controvertido debate, la Cámara Baja llevó a cabo la votación sobre esta ley, aprobándose con 131 votos a favor, 123 en contra y una abstención.
Mientras que, en las afueras del Congreso, se escuchaban los gritos de los seguidores a favor y seguidores en contra de su aprobación. Esto es lo que se llama media sanción, y para que este proyecto se transforme en ley debe ser ahora aprobada por mayoría simple del senado, y luego pasar al ejecutivo, es decir a manos del presidente.
Desde el punto de vista religioso, hasta ahora la mayor crítica había sido por parte de los fieles católicos, y no del clero, que a través de diversos grupos se han mantenido activos y han convocado a diferentes manifestaciones en Buenos Aires y otras provincias. Sin embargo, este 7 de julio, el Episcopado argentino se manifestó, aunque algunos consideran es un poco tarde, y convocó a una misa que denominaron, misa “por la vida”.
Misa “por la vida”
Esta misa “por la vida”, a la que convocó la iglesia católica a sus fieles, fue celebrada por el presidente del Episcopado, monseñor Oscar Ojea, junto a unos 50 obispos en un altar situado afuera de la basílica de Lujan, frente a la plaza, y ante la presencia de miles de fieles que acudieron al llamado. Cabe destacar que, el santuario de la Virgen de Luján, patrona nacional, es el principal emblema regional de la fe, de este país suramericano.
Fue visitado por el papa Juan Pablo II, y es visitado anualmente por millones de personas. Aemás el santuario es la sede de la principal peregrinación católica argentina: la peregrinación juvenil
Monseñor Oscar Ojea criticó severamente esta ley durante la misa. Dijo que de aprobarse esta ley sería la primera vez que, en Argentina, y en democracia, se legalice la “eliminación de un ser humano por otro ser humano”.
Así mismo, afirmo que “la vida es un don de Dios”, y que, a pesar de las situaciones difíciles, debemos defenderla y cuidarla. Fue muy elocuente al decir, que quienes defienden la vida dese el propio momento de la concepción, no podían quedarse solo en palabras, y debían asumir el compromiso para tratar ayudar a quienes tenían que seguir adelante con sus embarazos en situaciones difíciles. Entre otras cosas, culminó diciendo que “ el aborto no es un derecho sino un drama” , un drama que pone a decidir sobre la vida .
Será el próximo 8 de agosto, cuando el Senado decida sobre el proyecto aprobado en la cámara baja. Al parecer, hay tres grupos en Senado: el grupo que quiere aprobarla, los que quieren aprobarla pero con reforma y los que están en contra. Probablemente, luego de esta misa, la iglesia católica tiene su fe puesta en que aquellos senadores católicos que puedan tener dudas.