La Casa Blanca canceló el jueves la muy esperada reunión con el líder norcoreano Kim Jong-un. En una carta a Kim, el presidente Donald Trump escribió: "Siento que es inapropiado, en este momento, tener esta reunión largamente planificada".

Trump dijo que había estado esperando la cumbre, pero la "tremenda rabia y abierta hostilidad" en las recientes declaraciones del gobierno norcoreano finalmente inspiró al presidente a cancelar la reunión.

Declaraciones de Donald Trump

Trump escribió que sentía que se estaba formando un "diálogo maravilloso" entre él y Kim, y agregó: "en última instancia, es solo el diálogo lo que importa".

El presidente dijo que todavía espera encontrarse con el líder norcoreano en algún momento en el futuro.

"Si cambias de opinión sobre esta cumbre tan importante, no dudes en llamarme o escribir", dijo Trump. "El mundo, y Corea del Norte en particular, ha perdido una gran oportunidad de paz duradera y gran prosperidad. Esta oportunidad perdida es un momento verdaderamente triste en la historia".

Esta carta es emblemática del cambio masivo en el tono entre Trump y Kim, quienes hace unos meses estaban enfrascados en una acalorada guerra de palabras. En el transcurso de 2017, los dos líderes intercambiaron amenazas e insultos, a veces incluso criticando la apariencia o la estabilidad mental de cada uno.

¿Un fracaso para Trump?

La cancelación de la cumbre podría verse como un fracaso significativo para Trump desde el punto de vista de la política exterior. La administración Trump esperaba utilizar la reunión para presionar a Corea del Norte para que acepte la desnuclearización total.

Al principio, Corea del Norte parecía dispuesta a hacerlo, pero se volvió más hostil en las últimas semanas.

El gobierno de Corea del Norte recientemente amenazó con cancelar la cumbre en ejercicios militares conjuntos entre Estados Unidos y Corea del Sur, y expresó su preocupación por las declaraciones del asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Bolton, sobre cómo Estados Unidos podría abordar la desnuclearización de la Península Coreana.

Además, el viceministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte se refirió el jueves al vicepresidente Mike Pence como "estúpido".

"Como una persona involucrada en los asuntos de Estados Unidos, no puedo reprimir mi sorpresa ante comentarios tan ignorantes y estúpidos que brotan de la boca del vicepresidente de Estados Unidos", dijo Choe Son-hui en un comunicado emitido por las noticias estatales de Corea del Norte.

La administración Trump también se había comprometido a ayudar a Corea del Norte a reforzar su economía a cambio de la desnuclearización, pero tales promesas aparentemente no fueron suficientes para alterar el tono de Pyongyang y salvar las conversaciones.