El presidente Trump dijo el jueves que impondrá aranceles punitivos en el acero y el aluminio que se importa de países como: China, Alemania, Canadá; entre otros, en una importante escalada de su ofensiva comercial "América Primero", desafiando a los líderes republicanos del Congreso, invitando a represalias de los socios comerciales de EE.UU y sacudiendo el mercado bursátil.

En una reunión en la Casa Blanca, el presidente Donald Trump dijo que había decidido imponer aranceles del 25 por ciento sobre el acero fabricado en el extranjero y el 10 por ciento sobre el aluminio.

Medidas que él espera que expandan las compañías. "Vamos a imponer aranceles a las importaciones de acero y a las importaciones de aluminio, y verán que suceden muchas cosas buenas", dijo el presidente.

Países en conflictos

Se espera que estas nuevas medidas del presidente, bajo una provisión de seguridad nacional poco utilizada de la ley comercial de los Estados Unidos, provoque desafíos legales por parte de China, la Unión Europea y Brasil en la Organización Mundial del Comercio. También algunos críticos estimaron que pudieran ser contraproducentes para los agricultores estadounidenses y otros exportadores. Luego de La declaración de Trump, siguieron horas de interrogantes y confusión. El presidente inicialmente planeó un anuncio formal para la mañana del jueves, lo canceló en medio de la reacción de los opositores, y finalmente reveló las nuevas barreras comerciales luego de reunirse con distintos ejecutivos de la industria.

Distintas reacciones

Canadá, uno de los aliados más cercanos de los Estados Unidos, calificó el paso como inaceptable y se comprometió a responder cuando los gravámenes entren en vigor. El presidente dijo a través de su cuenta Twitter que las industrias de acero y del aluminio han sido maltratas por años de un comercio injusto y por políticas deficientes con otros países La nueva medida que impone los aranceles revolvió las líneas políticas, atrayendo los rechazos de los republicanos y de los grupos conservadores, mientras obtuvo el aplauso de algunos demócratas.

Por supuesto, era de esperarse que un anuncio como este causara revuelo por el riesgo al que conlleva. Es por ello, que el presidente tendrá que enfrentar las posibles represalias de otros países, en especial la de los más afectados, entre ellos China y Canadá. Por ejemplo, en el caso de argentina, el mayor impacto afectaría las firmas Techint y Aluar. En el año 2017 las exportaciones de acero a Argentina se elevaron a unos 220 millones de dólares, y las de aluminio a unos 500 millones de dólares.