Aunque el camino no ha terminado, los representantes de Reino Unido podrán seguir siendo parte en las negociaciones que tengan lugar en el seno de la UE. Desde el 29 de marzo de 2019, fecha de desconexión del Reino Unido con la Unión Europea hasta el 31 de diciembre de 2020 será el periodo que fue establecido por los representantes de ambas partes para formalizar la ruptura definitiva de estos canales, durante tal periodo el gobierno británico podrá seguir siendo parte de las negociaciones e incluso cerrar tratados comerciales, pero sujeto a la condición de que no tiene derecho a voto.

Hay un acuerdo sobre "una amplia parte de lo que constituirá el acuerdo internacional para la retirada del Reino Unido", declaró Barnier.

Periodo de transición

Este periodo conocido como una transición se da como un alivio para la economía de ambas partes e incluso de diferentes sectores, lo cual con la ampliación de este plazo hace que la consumación del brexit afecte menos a todo lo que ya ha sido establecido, siendo entonces que se generará un golpe menos profundo ya que tendrán el tiempo suficiente para establecer medidas y políticas que no los lleven a una caída económica o como ya fue mencionado, que afecte los sectores más vulnerables como son el bancario e incluso el aéreo.

El acuerdo que fue establecido permitirá que las empresas sigan funcionando con normalidad dentro de cada uno de los espacios sin verse afectadas tras la salida del Reino Unido.

Este plazo, al cual se llegó en el acuerdo, fue negociado tras la petición de las distintas compañías que tienen en sus canales de actividad influencia en ambos lados. Sin embargo, al Reino Unido no le queda de otra más que aceptar el 100% de las demandas que han sido impuestos por la Unión Europea, sobre los derechos de los ciudadanos europeos.

Acuerdo

Esto se considera un logro importante para ambas partes ya que después de unas largas horas de negociación se logró llegar a un acuerdo incluso en temas que generaban mucha polémica, como es el tema del dinero, "Pero queda mucho trabajo pendiente, sobre todo sobre Irlanda", ha dicho el galo.

Igualmente establecieron que los británicos que vayan a las zonas de influencia de la Unión Europea seguirán teniendo los mismos derechos de todos los ciudadanos europeos, durante el plazo que dura el periodo de transición hasta que se formalice totalmente el brexit.

"Creo que lo que esto demuestra es que, con buena voluntad de ambas partes, trabajando duro, podemos llegar a un acuerdo para el futuro que sea de interés para el Reino Unido y de interés para la Unión Europea", precisó la primera ministra británica Theresa May, demostrando entonces que este acuerdo significa y expresa la buena voluntad que existe de ambas partes lo que les permitirá mejores relaciones en un futuro.