El estudio de la cultura francesa “da unos valores que pueden ser útiles a todos, como el sentido crítico y un gusto por los valores democráticos”, dijo el escritor, editor y traductor francés Philippe Ollé-Laprune. En entrevista con BlastingNews por la conmemoración del día internacional de la Lengua Francesa -establecido el 20 de marzo por la Organización de Naciones Unidas (ONU)-, aseguró que los jóvenes y las personas de cualquier edad pueden mejorar su vida si tienen la disposición para aprender una cultura diferente.
El escritor explicó que las lenguas se adaptan a los lugares dónde se aprenden y utilizan (igual que los organismos biológicos): “las lenguas tienen vida y por ello se les puede celebrar de la misma forma que a un ser”.
“Lo más hermoso de la lengua francesa es su vida, la forma en la que siempre está evolucionando”, destacó Philippe Ollé quien al interior del cuerpo diplomático francés coordinó la publicación de casi un centenar de libros, así cómo su traducción del francés al español (en más de 15 editoriales).
Al preguntarle si el idioma francés todavía es “la lengua del amor”, el escritor dijo que todas las lenguas que hay en el mundo son lenguas del amor, sin embargo, es posible que el francés tenga mayor fama de serlo debido a los principios de la poesía con los trovadores.
Niños
En la ONU se ha hecho extenso el interés por conservar la diversidad cultural mundial mediante el fomento del multilingüismo, es decir, que personas y comunidades puedan expresarse en varias lenguas.
Cuestionado con respecto a la importancia que tiene incluir el multilingüismo en la educación de los niños, Ollé-Laprune, quien tiene más de dos décadas de experiencia como promotor cultural intercontinental dijo, que la enseñanza de varias lenguas es de gran relevancia porque “una lengua implica una forma de estar en el mundo.
Si uno crece con varios idiomas en su haber tiene una vida más rica, tiene varias vidas en el”.
Gran migrante
Philippe Ollé-Laprune quien ha trabajado con el Parlamento Internacional de Escritores (donde se brinda apoyo a escritores, sobre todo, a quienes dejan sus países para salvaguardar su integridad), expone en su más reciente libro: Los escritores vagabundos (Tusquets), la fecunda relación que hay entre la escritura y los viajes de varios autores (quienes tuvieron la aventura de irse a otro país), entre ellos Ernest Hemingway quien al migrar, adquiere una lengua diferente y con ello, nuevas formas de expresar su escritura y proliferarla.
Así, Philippe Ollé-Laprune revela cómo la errancia de escritores impacta a favor de la literatura.
De hecho, el francés es una de las lenguas que ha tenido mayor migración en la historia, estimaciones de La Organización Internacional de la Francofonía (OIF) indican que, en compañía del inglés, son los únicos idiomas que tienen presencia en los cinco continentes. Con 274 millones de francófonos, es uno de los seis idiomas más hablados y el tercero para el comercio en al menos 84 gobiernos o estados, dónde 6 de cada 10 personas son menores de 30 años, sobre todo en África, continente dónde más se habla francés.
Festejos
La celebración anunciada por la diplomacia francesa es una “cena mundial” “Goût de/Good France”, que por cuarta ocasión se realiza -el 21 de marzo- en mas de 150 países en los cinco continentes; durante todo el día se brindará un mismo menú a la francesa con la participación de al menos 3000 restaurantes.
En España -en colaboración de la Real Academia Gastronómica-, más de 50 chefs diseminados por “la geografía española, de Santa Cruz de Tenerife a Lérida y de los Baleares a Galicia”, celebrarán a sus comensales en bistros, cafés y tabernas. La lista de los restaurantes está en: es.ambafrance.org. La Embajada de Francia en España realizará una cena de gala (chef Maxime Lebrun).
La ONU y la Organización Internacional de la Francofonía anunciaron alrededor de 800 eventos en el mundo que pueden observarse en: http://bit.ly/2FLHitU Entre ellos destaca la bella iniciativa que se realiza en la República Democrática del Congo, a iniciativa del Instituto Francés de Lubumbashi, dónde se organizan una “ofrenda de poesía urbana”, no hay límite de edad y cualquiera puede participar, incluso, sin importar si habla francés, congoleño o lenguas locales, sólo basta tener la intención de regalar un poema a las personas que pasen por la vía pública.