Los Ejercicios militares anuales de Foal Eagle y Key Resolve entre los Estados Unidos y las tropas del sur de Corea son asuntos regulares y han esidoretrasados. Estos habían sido diferidos debido a los Juegos Olímpicos de Invierno 2018 y los Juegos Paralímpicos en Corea del sur que recientemente llegaron a su fin. Los ejercicios ahora están programados para comenzar en abril.
ABC News informa que Corea del Norte generalmente trata esto como una excusa para llevar a cabo sus provocativos ensayos nucleares y de misiles. Sin embargo, podría haber un cambio en la forma en que se ve esto debido a la reunión cumbre propuesta entre el presidente Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un.
Los ejercicios militares
El objetivo principal de los ejercicios militares anuales conjuntos entre los Estados Unidos y su aliado Corea del Sur es garantizar que ambos lados estén sintonizados en la misma frecuencia. Eso se traducirá en una interacción eficiente en tiempos de crisis. El Pentágono ha confirmado que la reanudación de los ejercicios está programada para el 1 de abril de 2018, y la escala será similar a la del pasado.
La decisión ha sido transmitida al Ejército Popular de Corea, que es el título oficial del ejército de Corea del Norte.
La participación de las tropas de Corea del Sur en el Foal Eagle será comparativamente más que la de los Estados Unidos. Esta parte del ejercicio consiste en familiarizarse con las armas sofisticadas y el entrenamiento práctico. Sin embargo, en los ejercicios de Key Resolve, la cantidad de personal involucrado sería más o menos igual en ambos lados porque se tratará de un ejercicio de simulación por computadora.
Alianza estratégica
Estados Unidos tiene sus barcos de guerra situados en la península de Corea y los ejercicios militares anuales con Corea del Sur ha sido una actividad regular durante muchos años.
Siempre ha sido un tema de disputa con Corea del Norte que, en el pasado, lo haya visto como una preparación para un ataque contra su país. El teniente coronel Christopher Logan, portavoz del Pentágono, ha dicho que estas son, y siempre han sido, actividades orientadas a la defensa.
La cumbre propuesta entre Donald Trump y Kim Jong Un ha ayudado a aliviar la tensión, en cierta medida, en la región. Esto fue posible porque Moon Jae-in, el presidente de Corea del Sur, aceptó la rama de olivo extendida por Kim y lo convenció de participar en los Juegos Olímpicos de Invierno 2018. Eso rompió el hielo y surgieron esperanzas de normalizar las relaciones entre las dos Coreas y esto podría conducir a la paz. Sin embargo, tanto Donald Trump como Kim Jong Un son líderes impredecibles y los organizadores de la reunión lo están manejando con guantes de niños. La fecha de la reunión aún no ha sido anunciada.