Rob Porter, un importante asistente de la Casa Blanca que ha prestado servicio desde el comienzo de la administración, renunció abruptamente este miércoles, a raíz de las múltiples acusaciones de abuso doméstico, por parte de sus dos ex esposas.

Una nueva polémica gira alrededor de la Casa Blanca, cuando muchos rumorean si Donal Trump sabía, desde hace un tiempo atrás, de las acusaciones a Rob Porter, y el por qué él continuo trabajando como asesor en la Casa Blanca.

Cuando las noticias del escándalo estallaron, los funcionarios de la Casa Blanca, inicialmente defendieron a Porter. El jefe de personal, John Kelly se refirió a él como un hombre íntegro y de honor.

Las opiniones se contradicen

El jueves, el subsecretario de prensa Raj Shah, trató de aclarar algunas cuestiones pendientes sobre la autorización de seguridad de Porter, diciendo que estaba operando bajo una autorización provisional. También dijo que Porter ya no trabaja en la Casa Blanca y que su último día fue el miércoles. Raj Shah afirmó que el presidente Trump no sabía que Porter estaba operando bajo una autorización temporal, durante su tiempo en la Casa Blanca y dijo estaba entristecido por las noticias y por todas las personas involucradas.

Pero, el escándalo pone en duda lo dicho por Raj Shah, ya que las dos ex esposas aseguraron que en enero del 2017 denunciaron ante el FBI los presuntos abusos de violencia de Porter, lo que se desconoce es si el FBI llevó esa información a la presidencia.

Porter denunció las acusaciones como una campaña coordinada de desprestigio y emitió una declaración en la que dijo que las acusaciones ultrajantes eran simplemente falsas. Informó que había sido transparente y sincero acerca de los reclamos de sus exesposas.

Rob Porter acusado de violencia doméstica

Colbie Holderness y Jennie Willoughby en sus cuentas de redes sociales, publicaron una imagenes oscuras e inquietantes del secretario del personal, Rob Porter, describiendo casos múltiples de abuso emocional y violencia física.

Holderness, la primera esposa de Porter, aseguró que él en una ocasión se puso encima de ella, sacudiéndola fuertemente con intenciones de ahogarla, no lo suficiente para dejar marcas, pero si fue un acto aterrador y humillante. Ella publicó una serie de fotos, mostrándose con un ojo morado y un pómulo amoratado, que según ella, fueron el resultado de un puñetazo en la cara dado por Porter, hace más de una década.

Porter, de 40 años, era una figura de mucha importancia en el círculo de Donald Trump, ya que era el encargado de organizar los documentos que llegaban al escritorio del presidente. Él apareció en varias oportunidades detrás de Trump, cuando el mandatario le tocaba firmar un decreto.