Es urgente que el Gobierno de Venezuela y sus opositores reduzcan la tensión en el país, sentenció Stephan Dujarric, portavoz de António Guterres, Secretario General de Naciones Unidas (ONU).

Al lamentar los enfrentamientos ocurridos esta semana en el país sudamericano, Stephan Dujarric dijo que, para frenar la violencia, es necesario un compromiso sincero para reactivar el diálogo, en cinco puntos críticos: equilibrio en el ejercicio de los poderes de esa nación, respeto a los derechos humanos, elecciones, defensa de la justicia y la verdad, y estabilidad socioeconómica.

Dijo que el pueblo venezolano debe recibir los beneficios concretos del diálogo, sólo así se podrá disminuir la polarización y, entonces, estar en condiciones para empezar a resolver las necesidades más apremiantes que tiene le país.

Aseguró que el organismo internacional no quitará los ojos de esa nación y observa cuidadosamente cada uno de los acontecimientos, como las marchas de este miércoles, dónde las tensiones se desbordaron en violencia, ocasionando no sólo choques entre “las fuerzas de seguridad” y los manifestantes, sino cobraron la vida de tres personas -dos manifestantes y un representante de la guardia nacional-, así como más de 500 personas detenidas.

El portavoz dijo que Venezuela es observada con detenimiento desde hace tres semanas, cuando la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia dejó sin funciones al Parlamento Venezolano, e inicio una “ola de movilizaciones”.

Hace menos de un mes...

De hecho el 31 de marzo pasado, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, emitió un exhorto a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de Venezuela para que analizaran mejor su decisión y evitara “asumir los poderes legislativos de la Asamblea Nacional”.

Añadió que los sistemas democráticos necesitan para funcionar mantener separados sus poderes de gobierno, de esta manera los derechos humanos de la población gobernada están garantizados y protegidos.

Venezuela ratificó el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos

Zeid Ra’ad Al Hussein aseguró que el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos firmado por Venezuela, establece que: participar en asuntos de dominio público es un derecho que tienen los venezolanos, y pueden hacerlo mediante sus representantes elegidos bajo libertad.

Por ello este Pacto internacional también protege a los diputados electos por la población, quienes deben ejecutar sin obstáculos sus funciones constitucionales, sin embargo la Corte dictaminó ejercer los poderes de la Asamblea Nacional porque estaba en “desacato” al oponerse a la política de estado del presidente Nicolás Maduro, a quien, por cierto la Suprema Corte también advirtió que de seguir por el mismo camino podría llevar a la población a un estado de conmoción.

Ante este panorama, el Alto Comisionado estableció comunicación con el gobierno venezolano y pidió garantizar a los ciudadanos su derecho a la “libertad de reunión pacífica y libertad de expresión”. Al mismo tiempo hizo evidente su preocupación ante nula independencia de los responsables de vigilar y defender el “Estado de Derecho”.

Finalmente dijo que, si se empieza por respetar los derechos humanos, se prepara el terreno para buscar las mejores soluciones y salir de la crisis de alimentos y medicinas en Venezuela.