Para esta tarta vamos a necesitar los siguientes ingredientes:

  • Galletas con relleno de fresa o galletas tipo maría (en el caso de los celíacos y de los intolerantes a la lactosa)
  • 80g de mantequilla (a temperatura ambiente)
  • 400ml de nata para montar o crema de leche (sin lactosa en el caso de los intolerantes)
  • 250ml de leche (sin lactosa)
  • 2 sobres de cuajada o gelatina neutra (ya sea en polvo o en láminas)
  • 1 caja de queso de untar tipo Philadelphia (sin lactosa)
  • 250g de nubes
  • Molde desmoldable
  • Nubes, purpurina comestible, fideos de colores… Lo que más nos guste para decorar

En un vaso batidor ponemos las galletas y trituramos hasta que queden con una textura similar a la de la arena.

Mientras tanto, ponemos la mantequilla en un recipiente apto para microondas y fundimos (con cuidado que se derrite muy rápido).

Mezclamos las galletas con la mantequilla (hasta que quede una masa húmeda) y volcamos sobre nuestro molde desmoldable. Extendemos bien con la ayuda de una cuchara y reservamos en el frigorífico mientras preparamos la crema de nubes.

En una olla ponemos la nata para montar y la leche (a fuego bajo-medio) e incorporamos poco a poco las nubes… Hasta que se fundan.

Vamos removiendo poco a poco y cuando se hayan desintegrado, le añadimos los sobres de cuajada y removemos bien con unas varillas para que no queden grumos.

Si hemos optado por la gelatina en láminas, tendremos que hidratarlas previamente en agua fría (echamos una a una para que no se nos peguen).

Cuando hayan pasado alrededor de 5 minutos, las escurrimos muy bien con las manos y las agregamos a nuestra crema. Removemos bien con unas varillas para que se deshagan y no se vayan al fondo.

Si elegimos la gelatina neutra en polvo, sacamos un poco de la mezcla en un vaso y desleímos la gelatina con un tenedor. Cuando se haya disuelto, la incorporamos.

Por último vamos a añadir el queso de untar y removemos hasta que nos quede una mezcla homogénea.

Cuando tengamos nuestra crema lista, sacamos el molde del frigorífico y la vertemos (con ayuda de un cazo o de una cuchara, para que no se nos deshaga la base).

La llevamos de nuevo al frigorífico hasta que esté cuajada, mejor si está 24 horas.

Trucos:

Si no tenemos microondas podemos fundir la mantequilla en el fuego o al baño maría.

Si con la mantequilla las galletas no quedaran suficientemente húmedas, le podríamos echar un poco de leche.

Esta tarta no lleva azúcar porque las nubes ya son bastante dulces.

Yo prefiero usar cuajada porque hace que esté más cremosa.

Podemos decorar con más nubes, con fideos de colores o con decomagia rosa (Dr. Oetker).

Aporte calórico:

Las nubes no engordan tanto como parece, 12 nubes pueden tener alrededor de 100kcal.

Es una tarta perfecta para una cena romántica o un cumpleaños ‘rosa’.

¡Qué aproveche!