Hoy os enseñaremos una receta que destaca por su sencillez y originalidad, además de ser un plato muy económico y en el que no se invertirá mucho tiempo. Los rollitos de jamón cocido y queso Philadelphia son una excelente alternativa a los pesados y poco digestivos san jacobos o los típicos flamenquines, te sorprenderá su sabor y lo ligero que resultan. A continuación os mostramos lo que necesitaréis para prepararlos:
Ingredientes:
- Jamón cocido en lonchas, tamaño sandwich
- Queso tipo Philadelphia
- Pimienta negra molida
- Dos huevos
- Pan rallado
- Harina
- Perejil seco
- Ajo molido
Preparación:
Lo primero que tendremos que hacer será huntar el queso en cada loncha de jamón cocido, a lo largo de toda su superficie, las lonchas deben de ser pequeñas, tipo sandwich, para que nos queden unos bonitos y pequeños rollitos que se puedan comer en un par de bocados.
A continuación le añadiremos pimienta y acto seguido procederemos a enrollar las lonchas sobre sí mismas. Los rollitos quedarán sellados gracias al queso Philadelphia. El siguiente paso será disponer dos huevos batidos en un plato o recipiente, igual haremos con la harina y el pan rallado. A éste último, le añadiremos un poquito de perejil seco y ajo molido, que le darán ese toque especial. En algunos supermercados es posible comprar el pan rallado mezclado ya con el perejil y el ajo añadido.
A continuación, iremos rebozando los rollitos en la harina, uno por uno, luego los bañaremos en el huevo batido y por último los rebozaremos en nuestro pan rallado especial.
Es importante hacerlo siempre en el mismo orden que se indica. Después de este paso ya tendremos los palitos listos para freir. Lo ideal es freirlos en aceite de oliva a 180 Cº, sólo habrá que esperar a que adquieran un tono dorado, por lo que en menos de dos minutos estarán listos. Así, quedarán dorados y crujientes por fuera, por dentro estarán calentitos y con el queso Philadelphia derretido. Es buena idea colocar papel de cocina en el plato antes de colocar los palitos, así absorberán el exceso de aceite que puedan tener. Opcionalmente, se le puede añadir un poco de sal fina por encima. ¡Buen provecho!