Para BlastingTalks - entrevistas exclusivas de Blasting News con líderes empresariales y culturales - entrevistamos a Judit Izquierdo, CEO y fundadora de Siquia, una plataforma digital que brinda un servicio de psicoterapia online mediante videoconferencia para ayudar a todas las personas que necesitan atención psicológica. Nos cuenta, además, todas las ventajas y los tabúes que existen sobre la salud mental a día de hoy.
Blasting News: Siquia es una plataforma de terapia online con psicólogos, ¿cómo surgió la idea de crear su empresa?
Judit Izquierdo: Siquia surge en el año 2012 y es una iniciativa que yo misma desarrollé.
Estaba estudiando Psicología, tras haber cursado Periodismo y haberme dedicado a la Comunicación Corporativa. Entendí, en ese momento, que el sector de la Psicología era un nicho en el que se podían ofrecer servicios de Marketing profesionales para psicólogos. Al desarrollar la idea, descubrí que lo más interesante era crear una plataforma en la que Siquia se encargase de generar tráfico y demanda de pacientes que estaban interesados en recibir ayuda psicológica y derivar esas consultas a psicólogos especialistas para que los atendiesen.
En 2012, la idea pionera fue el hecho de centrarnos en la terapia online de manera totalmente innovadora, dado que en el año 2012 no había ninguna plataforma, ordenada ni estructurada, que ofreciese únicamente terapia online en castellano.
Desde entonces ha evolucionado mucho. Ahora lo vemos como algo normal, tras la pandemia, pero en aquel momento era disruptivo.
¿Con cuántos profesionales cuenta Siquia? ¿Puede elegir el cliente con quién quiere tener su terapia?
Siquia cuenta con un equipo de psicólogos internos que atiende todas las consultas que llegan a la plataforma. Normalmente, el paciente que busca psicólogo, no tiene uno de referencia a quien acudir. La forma de buscar psicólogo no es buscar a un profesional concreto, sino que el paciente es consciente de que tiene una necesidad, un problema o dificultad que resolver en su vida, bien puede ser de ansiedad, depresión, estrés, tomar una decisión, cambiar de trabajo, superar un momento difícil… y solicita asesoramiento para que le indiquemos quién es la persona más adecuada para resolver esa necesidad.
La manera en la que operamos en Siquia es que recibimos la consulta y la atendemos en una sesión totalmente gratuita para conocer la casuística, para que la persona también nos conozca y vea cómo trabajamos y cómo la terapia online va a ser útil en su caso.
¿Cree que existe un cierto tabú en la sociedad cuando se habla de psicología?
Sí. Sigue habiendo un tabú porque son temas que se siguen quedando en la intimidad. Es cierto que las generaciones jóvenes se sienten más libres a la hora de hablar de temas relacionados con la salud mental y las emociones, lo que facilita que el hecho de acudir al psicólogo vaya estando más normalizado. No obstante, la mayoría de los pacientes comentan que han acudido al psicólogo, o bien cuando han terminado la terapia o cuando ya están en terapia.
La opción de acudir a un profesional no suele ser la inicial, a pesar de que el diagnóstico temprano, igual que con la salud física, facilita el tratamiento.
Por otra parte, acudir al psicólogo también está rodeado de tabúes porque va asociado a una cierta fragilidad personal, es decir, el hecho de no haber sido capaz de resolver una situación cuando otras personas sí lo han conseguido es un punto negativo que hace que sea más difícil acudir al psicólogo. Con todo ello, también cabe señalar que en el servicio de salud pública hay muy pocos psicólogos, lo que nos lleva de manera indirecta a tener que recurrir a los profesionales privados, suponiendo un coste económico y, por tanto, una dificultad añadida.
¿Con qué frecuencia es recomendable acudir al psicólogo?
No hay una frecuencia que sea válida para todos porque cada persona acude al especialista en un momento distinto de la problemática y, por tanto, cada una va a necesitar un tratamiento personalizado, que es una de las cosas que define el cómo trabajamos en Siquia. Hay personas que necesitan un tiempo más largo para entender una situación y afrontarla, mientras que hay otras que son más enérgicas y lo superan de otra manera.
En el caso de Siquia nos adaptamos a los tiempos del paciente y a las posibilidades de cada uno. En la primera sesión se establece en qué situación se encuentra el paciente para resolver esa necesidad más inmediata y, así, luego seguir profundizando a lo largo de las sesiones.
Si queremos establecer un estándar, podemos decir que las primeras sesiones son más cercanas en el tiempo -una sesión por semana o cada quince días-, y luego se van espaciando según la necesidad del paciente. Esto es similar a cuando se acude a un nutricionista para perder peso. Si se siguen las marcas pautadas de manera estricta, avanzaremos más rápido, mientras que, si somos más laxos, avanzaremos más lentos. Cada persona es un mundo.
En ciertas ocasiones, por desconocimiento, no todo al mundo acude a terapia cuando realmente sí lo necesita, ¿podría comentarnos en qué situaciones más o menos cotidianas sería aconsejable visitar a un psicólogo? (Ejemplos: divorcio, enfermedades, situaciones complicadas, cambios de vida bruscos…).
Hay que acudir al psicólogo cuando creamos conveniente que hay que hacerlo, es decir, en el momento en el que veamos que nosotros solos no somos capaces de resolver una situación o cuando consideramos que una dificultad se alarga más en el tiempo de lo que se suele considerar como normal.
No obstante, ir al psicólogo no va asociado a que tengamos ninguna enfermedad. Un psicólogo nos va a ayudar a ver la situación desde otros puntos de vista, reflexionar, aprender a valorarnos mejor, mejorar nuestra autoestima y, sobre todo, adquirir habilidades y herramientas para resolver el problema que tenemos para afrontarlo tanto en el presente como en el futuro, es decir, aprender las habilidades para que en el futuro seamos nosotros mismos de forma individual quienes lo resolvamos.
Ahora mismo los temas más habituales por los que las personas acuden a Siquia son cuestiones de apego, relacionados con la pareja, de ansiedad, de estrés, de depresión y para resolver dificultades cotidianas de la vida como la toma de decisiones que sean significativas.
¿Puede comentarnos qué ventajas obtienen sus clientes al elegir la terapia online en vez de la tradicional?
Por una parte, la videoconferencia es un sistema de comunicación ya normalizado, no es una cuestión que haya inventado la Psicología, sino que hace años que utilizamos WhatsApp, que existe Skype, que nos comunicamos a través de herramientas digitales y de chat. Lo que sí que ha cambiado es el hecho de que hayamos normalizado que la terapia por videoconferencia es igual de útil que la terapia tradicional. Como ventajas más significativas y que son bastantes evidentes son: el ahorro de tiempo; el ahorro económico; más flexible y adaptado a la vida moderna.
Igualmente, suele ser más económica que la terapia tradicional, a pesar de que el proceso de la sesión es igual que la tradicional, existe un ahorro de costes en estructuras, en algunos casos.
En el caso de Siquia esto último no sucede, ya que los psicólogos trabajan en un gabinete específico para este trabajo. Sin embargo, con el fin de democratizar el acceso a la psicología y ponérselo más fácil al paciente, siempre hemos apostado por una terapia accesible para todos.
El 2020 ha estado marcado por la pandemia de Coronavirus y más de un año después, el virus sigue haciendo estragos. ¿Cómo vivieron en su empresa los meses de confinamiento? ¿Qué han aprendido durante ese tiempo?
En nuestro caso no hubo cambios significativos, dado que ya operábamos en la mayoría de las situaciones en forma de teletrabajo. El equipo de psicólogos está en una ubicación, el de Marketing en otro, el de contenido en otro, por lo que en este sentido seguimos trabajando igual.
Sí que es cierto que, en los momentos de confinamiento, tuvimos que trabajar todos desde nuestra casa, pero contamos con un sistema de contacto, de gestión de proyectos y tareas digitalizado totalmente, con lo cual pudimos hacer el seguimiento con normalidad.
Lo que sí varió fue el hecho de que muchos pacientes se tuvieron que enfrentar a ese proceso de adaptación y tuvimos que hacer un esfuerzo extra para el acompañamiento.
Los medios de comunicación ya advirtieron el año pasado que el confinamiento perjudicaría la salud mental de muchas personas, sobre todo de los más jóvenes, ¿ha notado durante este tiempo un incremento en las visitas a su plataforma?
Más que un aumento de las personas que van al psicólogo, lo que se ha notado es que el paciente ha normalizado el hecho de que acudir a terapia online es válido y, por lo tanto, se ha acelerado la toma de decisión sobre si acudir a terapia presencial u online.
Ahora ha normalizado que la modalidad online también es perfectamente válida y útil.
Gran parte de nuestra audiencia es un público joven que está habituado a comunicarse por canales digitales y, por lo tanto, se siente cómodo al ser atendido online. Lo que está claro es que la pandemia nos ha afectado a nivel emocional a todos, pero se nota que en los momentos en los que a nivel socioeconómico hay menos estabilidad, el paciente es más prudente a la hora de iniciar terapia.
El hecho de que la gente tenga la necesidad de acudir a terapia es evidente, pero hacerlo depende más de su perfil y grupo de usuarios al que pertenezca.
¿Qué riesgos puede acarrear para la salud de las personas no acudir a un psicólogo a tiempo?
Como en el caso de las enfermedades físicas, en el caso de la salud emocional lo que lleva es a que los tratamientos sean más largos.
Un diagnóstico temprano ayuda a que la mejoría sea más rápida y que la persona lo haga con mayor facilidad.
A modo de conclusión, ¿puede dar a nuestros lectores algunos consejos para sobrellevar la actual situación sanitaria y económica?
No se pueden olvidar de cuidar su salud emocional de la misma manera que cuidan su salud física. Pueden hacer actividades que les enriquezcan y que les produzca satisfacción. Que cuiden de sí mismos y que, en caso de tener necesidad, consulten con un psicólogo, que recuerden que también tienen a su disposición los servicios de salud pública para que les ayuden en estos casos. No obstante, están todos invitados a probar una sesión en Siquia. La primera es gratuita.