La multinacional estadounidense ha propuesto que se mantengan operativas las fundiciones, tanto la de Avilés como la de A Coruña; abrir un plazo para encontrar un posible comprador hasta el próximo 30 de junio del 2019 y que queden 200 puestos de trabajo activos, algo que el Comité de trabajadores considera inaceptable. Esto implicaría el despido de dos tercios de los actuales, 700 trabajadores; pero este 15 de enero se termina el periodo de consulta del ERE por extinción de empresa.

Alcoa quiere mantener las instalaciones en mínimos hasta junio

Esta ha sido la última propuesta que ha puesto encima de la mesa la empresa; eso sí, los trabajadores tendrían que comprometerse a no presentar demandas colectivas durante el proceso y debería existir unanimidad entre los representantes de los trabajadores y, a cambio, las fundiciones tanto de Avilés como la de A Coruña se mantendrían operativas. Además, se dejaría abierta la conocida como “la torre de pasta” situada en A Coruña, que da empleo a un total de 200 trabajadores.

Los trabajadores se niegan al plan de la empresa

Pero, para ello, la multinacional exige que se realice un cese moderado de las cubas para poder llevar a cabo el rearranque de las fábricas por sí aparece un nuevo comprador (pone de fecha límite el próximo 30 de junio).

Si no tuviera lugar el rearranque, se verían obligados a demoler las series. El cese ordenado se iniciaría treinta días después a que se acabase el período de consultas, o sea, a mediados del mes de febrero, y habrá un compromiso por parte de Alcoa de abrir un período de lo que se conoce como “venta activa” hasta el 30 de junio.

El personal afectado por el cierre de la actividad de electrolisis entraría en un ERTE bajo las condiciones de los despidos que ya se habrían pactado en un acuerdo, que se validaría por parte del Ministerio de Trabajo y cuyo objetivo sería encontrar posibles compradores de la planta. Estas condiciones también afectarían a los trabajadores que permanecerían en la empresas hasta el 30 de junio aunque no se encuentre un posible comprador.

Dentro de un plan social para la empresa, Alcoa ofrece a los trabajadores prejubilaciones, mejora en las indemnizaciones económicas y recolocaciones externas (los trabajadores temporales también se beneficiarían de estas condiciones). El Comité considera inaceptable estas condiciones ya que se despiden a dos tercios de los trabajadores, sin ninguna clase de garantía y coartando una posible defensa legal. Sin duda, los trabajadores ya se encuentran son tiempo para poder encontrar una posible solución.