Mikel Merino es producto de la cantera de Tajonar. En 2016, gracias a su brillante actuación en los playoffs de ascenso a primera división con Osasuna, le llegó una oportunidad única, poner rumbo a Alemania para recalar en el Borussia Dortmund. No tuvo las oportunidades que él hubiera deseado, puesto que la competencia y el nivel de la plantilla eran muy altos y tuvo que atrasar su posición, teniendo que jugar de central.

A pesar de todo, fue una etapa para ir madurando. En 2017 llegó a las islas británicas. Concretamente a Newcastle. Tuvo un inicio de temporada extraordinario, siendo galardonado como el mejor futbolista del club.

Sin embargo, las lesiones que tuvo no le dieron continuidad en su juego.

2018 como punto clave en su carrera deportiva

El verano de 2018 fue clave en la trayectoria futbolística de Mikel Merino. A pesar de su juventud y de no haber tenido muchos minutos, estuvo muy cotizado. Tanto que, equipos como Athletic, Betis y Real Sociedad se disputaban su fichaje como si se tratase de una batalla de gladiadores. Y es que, no estaban mal encaminados. Mikel Merino era el futuro. Fue la Real Sociedad quien se llevó el gato al agua. Aunque en un primer momento se criticó el montante de la operación económica como algo desproporcionado (12M €), a la larga ha quedado reflejado que la rentabilidad ha sido total.

La primera temporada en el cuadro txuriurdin estuvo marcada por los altibajos que tuvo el equipo, con cambio de entrenador incluido. Sin embargo, fue con la llegada de Imanol Alguacil cuando llegó el resurgir de Mikel Merino. Los buenos partidos que disputó tanto en el Camp Nou como en el Reale Arena ante el Real Madrid (marcó un gol) eran la antesala de lo que le esperaba a la parroquia donostiarra, disfrutar de un mago.

Es el futuro de la selección española

Esta temporada ha dado el salto que todos deseaban. Mikel Merino es un mediocentro con mucho recorrido, box to box. Es un gran recuperador de balones, tiene un gran control del juego, buen dominio del balón y gran habilidad para llegar en segundas jugadas, yendo muy bien en el balón aéreo y teniendo buen disparo.

En el cuadro txuriurdin, Odegaard y Oyarzábal son los futbolistas que acaparan los titulares en todos los medios. Sin embargo, es Mikel Merino el futbolista que hace jugar y crecer a la Real Sociedad. Es el faro que ilumina la bahía. Gracias al equilibrio que le da al equipo, Odegaard y Oyarzábal pueden tener esa participación en el juego.

Luis Enrique lo sabe. Mikel Merino es el futbolista que le falta a la selección. La gran temporada que está realizando no pasa en vano para los grandes clubes. Barcelona y Atlético de Madrid siguen sus pasos desde hace tiempo. Ha llegado la primavera y a pesar del coronavirus, la flor de Mikel Merino sigue floreciendo. De momento, no tiene límite.