El estadio de San Paolo se vestirá de gala para una noche que puede ser histórica. El equipo italiano nunca se ha clasificado para los cuartos de final de la máxima competición europea. Tanto es de importante el partido para el Napoli, que hoy en la ciudad se han suspendido los colegios y los comercios cerrarán antes de lo normal para que los aficionados puedan ver el partido en condiciones, aseguraban los medios locales. Esto va relacionado porque el estadio de San Paolo, ha abierto a las 15.30H de la tarde y en estos momentos ya se está llenando.
Por otro lado, en la noche de ayer, los ‘tiffossi’ del equipo capitaneado por Marek Hamsik, fueron a molestar a los jugadores blancos con gritos y canticos para no dejarles descansar tranquilos. Esto ocurría a altas horas de la madrugada. El Nápoles espera hoy dar el susto a un Madrid que viene con un buen estado anímico tras golear en su último partido de liga en un campo difícil como es el del Éibar.
Para ello y como dijo el entrenador del equipo italiano, intentará molestarles y buscar sus opciones con jugadas rápidas, movimiento de balón y sobre todo buscar la portería de Keylor Navas. Como ayuda, un estadio repleto de miles de aficionados napolitanos, convertirán esta noche Nápoles como un verdadero infierno.
El equipo de Zidane, por su parte, ha de estar tranquilo, pues llevan dos goles de ventaja del partido de ida. El Madrid, sabe que no será un partido fácil y más sabiendo cómo se está poniendo la cosa. Aun así, y fijándonos en los números, el equipo napolitano no sabes que cara te va a dar en el partido. Hace dos semanas perdieron en casa con el Atalanta por 0-2, en San Paolo.
Y en el último partido se la Serie A, se llevaron la victoria por 1-2, nada más y nada menos que en el Olímpico de Roma.
Sin duda alguna se viene otro partido Champions total, de esos en los que los equipos que deben hacer goles, lo buscan desde el principio y esto gusta a los espectadores. Hay que destacar que el Madrid va con dos goles de ventaja y eso le da cierta tranquilidad, pero después de la que se ha montado en Nápoles, viendo lo que se prepara en San Paolo y la locura que los jugadores del Madrid verán tras poner un pie en este estadio histórico, estoy seguro que en ese momento se les olvidará el 3-1 de la ida y para ellos el partido es único y solo hay un resultado 0-0.
Este dato le viene bien al equipo español, porque lo que han hecho los italianos con esto, aparte de motivar a su equipo, es también motivar al conjunto blanco.
Antecedente histórico: un resultado que valdría
Hay que remontarse al año 1987 para ver otro Nápoles – Real Madrid en octavos de final. En este caso la ida fue en Italia y la vuelta se jugó en el Bernabéu. El estadio fue un espejo de lo que podría ser hoy. Un ambiente hostil, bengalas, la afición apretando desde el minuto 1 al 90…
Maradona capitaneaba ese equipo, mientras que en el Madrid jugaban Buyo, Butragueño (anotador del gol madridista) y Michel entre otros. Sin duda alguna el Madrid firmaría el resultado que se dio en el año 87, pues el empate a uno metería al conjunto de Zinedine Zidane en los cuartos de final.
