Eran las 11:00 aproximadamente, cuando una banda de delincuentes entraban en una joyería del centro comercial Anec Blau de Castelldefels. El centro comercial estaba lleno de gente debido a la hora que era, aunque en la joyería solo había una dependienta atendiendo. Todos los atracadores estaban armados con pistolas.

Modus operandi

Según entraron, intentaron coger el mayor número de joyas que pudieron. La dependienta hizo todo lo que mandaron, aterrorizada desde que se dieron cuenta de que todo era real.

"Al principio creíamos que era todo una broma"- aseguraba una dependienta del centro comercial.

Todo fue muy rápido. Mientras se encontraban dentro de la joyería, una dependienta de un establecimiento cercano, se ha acercado y ha tirado una botella de agua contra el escaparate. Esto ha provocado que uno de los atracadores le apuntara con su arma, aunque afortunadamente no apretó el gatillo.

Este dato, dicen los mossos, da muestra de que se trata de una banda profesional, pues buscan realizar el robo lo más rápido posible, con el mayor éxito posible, y limpio, sin víctimas.

Los mossos, encargados de la investigación del caso, añaden al perfil de la banda profesional, el hecho de que los atracadores robaron un coche dos días antes, y después del crimen han quemado el coche. También han tenido en cuenta que llevaban todos sombreros y caretas para evitar ser reconocidos por las cámaras de seguridad del centro comercial.

Héroes, villanos y un tiroteo: todo de película

Lo más sorprendente de este suceso ha sido la aparición de un mosso fuera de servicio, que se encontraba en una peluquería de ese centro comercial. Cuando los atracadores se disponían a salir de la joyería, este mosso les salió al paso, todavía con la bata de la peluquería, e intentó parar a uno de ellos, con su arma en la mano.

Al ver al agente armado, los ladrones comenzaron a disparar contra él. Según confirman fuentes de los mossos, el agente no detonó su arma. Nadie resultó herido finalmente.

Actualmente los Mossos d'Esquadra han desplegado un gran dispositivo para intentar dar lo más rápido posible con los delincuentes. Algunos de los dependientes y clientes del Ànec Blau, no creyeron lo que veían sus ojos en un principio, pues todos coinciden que nunca habían visto un atraco a mano armada en un establecimiento. La mayoría siguieron en shock hasta que todo acabó, ya que todo fue muy rápido. Actualmente, el centro comercial se encuentra abierto al público, aunque la joyería sigue acordonada.