Jaulas de tamaño menor que un papel A4 para gallinas ponedoras. Tuercas presas en jaulas para ahorrar espacio y no machacar a sus cachorros. Estos son ejemplos comunes de encontrar en el día a día de las mayores empresas del sector de alimentos. Sin embargo, este escenario puede tener sus días contados y los Animales , a punto de tener mejores días y más bienestar.

Grandes empresas del sector están empezando a adoptar medidas para garantizar el confort y el bienestar del animal durante su vida antes del sacrificio. Hasta entonces, esa preocupación era algo exclusivo de ONGs sobre el tema y los consumidores preocupados por el tema, que a menudo buscaban alimentos orgánicos y de granjas que se preocupaban por esos puntos.

Unilever, por ejemplo, que tienen las marcas Arisco y Hellman's, es una de las empresas que prometió financiar investigaciones de métodos que evitan la muerte de pollitos machos, que acaban muriendo ya en el primer día de vida por no haber huevos. Una posible alternativa a este problema sería determinar el sexo de los pollitos antes de su nacimiento y encontrar una forma de hacer nacer sólo hembras.

La dama paola Rueda habla sobre el tema

Según Paola Rueda, de la protección mundial de animales, la presión por esa preocupación por el bienestar de los animales partió de los propios consumidores, que cada vez más buscan alimentarse de forma más consciente y ética. Esta entidad, en conjunto con la BRF, poseedora de marcas como Perdigão y Sadia, firmaron una carta de intención de comprometimiento a las prácticas de bienestar animal.

En la carta de intención, hay el inicio del sistema de gestación colectiva de cerdos en 12 años, por ejemplo.

La sostenibilidad y el bienestar animal ya es una realidad en Europa y empezó a dar sus primeros pasos en el mercado brasileño.

otras empresas de acuerdo con la proteccion de animales

Nestlé, otro gigante del sector, firmó un acuerdo para comenzar a seguir normas estrictas de protección a los animales.

Entre los requisitos, hay el espacio mínimo para crear bueyes y vacas, prohibiendo que ellos queden amontonados y permitiendo que ellos expresen los comportamientos que son de su naturaleza.

A pesar de posibles primeros pasos, las industrias de Brasil todavía están lejos del ideal cuando el asunto es el bienestar animal. Sólo hay un certificado el llamado Certificado Humano, que garantiza la producción de animales sin ningún tipo de sufrimiento. Ya esta en proceso las actividades para darle a los animales una mejor calidad de vida.