La impresionante erupción que tiene lugar en Hawái desde el 3 de mayo sigue su curso imparable y sin atisbo de frenar. La lava continúa fluyendo por las fisuras que se han abierto en la zona del Rift Este del Kilauea. Durante los últimos días lo está haciendo especialmente a través de la fisura número 8, de las más de 20 que se han abierto desde el comienzo de la erupción.
La erupción en Hawái ha creado un cono de 55 metros
Desde este punto, la llamada fisura 8, sale la roca incandescente creando el increíble río de lava que atraviesa varios kilómetros hasta llegar al mar, donde ha originado un auténtico delta de lava que cubre casi dos kilómetros cuadrados. Los terremotos siguen sacudiendo la zona. Además, el avance de la lava durante las últimas semanas ha hecho crecer la superficie de la isla en la zona por la que entra al océano, aunque por el momento es una superficie peligrosa y cubierta en gran parte por rocas incandescentes.
Cabe destacar también que la fuente de lava que sale de la octava fisura ha creado un cono de rocas que alcanza ya los 55 metros de altura.
Es una nueva montaña originada gracias al fluir de la lava desde lo más profundo de la tierra al exterior. Las estimaciones del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) son de una emanación de lava de 100 metros cúbicos por segundo a través de esta fisura. También fluye lava, aunque en mucha menor medida, de la fisura 22.
La lava llega al mar en Hawái a lo largo de 3 kilómetros de costa
Tras salir por la fisura, la lava se desplaza crean un gran río de lava que atraviesa lo que antes eran carreteras y viviendas, hasta llegar a un lugar en el que la lava desaparece de la superficie. La lava se introduce entonces por debajo de coladas de días anteriores, a través de túneles, hasta que llega a las cercanías del océano Pacífico, donde vuelve a emerger como pequeños ríos a lo largo de más de 3 kilómetros de costa y finalizan su recorrido en el mar.
En las zonas donde la lava se encuentra con el mar se crean una serie de vapores peligrosos, por lo que las autoridades de la isla tienen restringido el acceso a estas zonas, al igual que a las áreas más cercanas a los flujos de lava.
Desde que comenzó esta impresionante erupción en Hawái han sido destruidas cientos de casas e incluso ha desaparecido el mayor lago de agua dulce de la isla grande del archipiélago, el Lago Verde. También varias carreteras y otros servicios de la zona, como líneas de electricidad, han sido destruidas por el poder del volcán.