Recientemente se ha estudiado la característica de los seres humanos de que hacen las cosas mejor si otros los miran, o por lo menos alguien lo ha hecho de manera oficial. En la universidad johns hopkins un neurocientífico ha demostrado que cuando hacemos alguna actividad que requiere cierta habilidad, si somos observados lo hacemos mejor.
Estudio sobre capacidad del cerebro tuvo resultados positivos
Quizás esto no suene a una noticia nueva ni a un descubrimiento. Por ejemplo, los jugadores de fútbol son observados muchas veces por todo el mundo y demuestran su talento.
En este estudio lo nuevo puede ser que si nos sentimos presionados por alguien, es posible que aumentemos la concentración y lo hagamos mejor.
El estudio demostró que en el cerebro se produce una estimulación que provoca un mayor control de las habilidades debido a que se asocia el buen desempeño con una recompensa. En algunas circunstancias las personas se ponen nerviosas cuando alguien las está presionando o esperan algo de nosotros de manera inmediata.
Otro ejemplo son los cantantes. Muchas veces hemos observado que hay cantantes que cantan en vivo y la inspiración al hacerlo en público los hace cantar mejor, pero hay otros que usan una grabación y con la boca tratan de que el público piense que están cantando.
Este tipo de cantantes por lo general no tienen confianza de que al ser observados lo harán mejor.
Según el profesor de ingeniería biomédica en la Universidad Johns Hopkins tener gente mirándonos “podría hacernos mejor”, y “la audiencia es un incentivo”. El ejemplo de los jugadores de fútbol es muy apropiado, ya que cuando tienen la presión de que deben ganar, en el caso de los jugadores considerados importantes, la emoción los hace realizar jugadas históricas.
Actividad cerebral mejora cuando somos observados
Según los estudios, la actividad cerebral mejora su rendimiento cuando pensamos en otras personas y nos imaginamos la opinión que ellas tendrán de lo que estamos haciendo. Este experimento es interesante y sería bueno aplicarlo en aquellos países donde los empleados públicos no son eficientes porque nadie los está evaluando.
Estos estudios también se realizaron con personas jugando videos juegos ante la presencia de otras personas. Para hacerlo más exacto se les colocó sensores para medir la actividad cerebral. El resultado fue que en los que jugaron con la presencia de otros hubo un 20% más de rendimiento. Aunque este porcentaje no es muy alto para un video juego, lo cierto es que en otras áreas si puede significar algo positivo.
