La política de ‘’etiquetas’’, jaleada por los medios de desinformación y que tanto gusta a los tontos, ha catalogado al Frente Nacional como un partido ‘’ultraderechista’’, ‘’racista’’, ‘’homófobo’’, ‘’ultraconservador’’, etc. La realidad dista mucho de esta manipulación propia de los medios, amantes del titular sensacionalista y del aplauso fácil de la borregada.

Sin ir más lejos, Florian Philippot, la mano derecha de Le Pen, es homosexual. El Frente Nacional no se opuso a la Ley del matrimonio homosexual ni participó en las marchas que se convocaron en contra de la misma.

De hecho 1 de cada 3 homosexuales, admite votar al Frente Nacional, como por ejemplo Matthieu Chartraire (elegido Mister Gay en 2015). Tampoco está a favor de la prohibición del aborto, ya que según Le Pen, el 47% de las mujeres deciden abortar por razones económicas y es ahí donde el Estado debería ayudar económicamente a esas mujeres, pero bajo ningún concepto prohibirlo. Más de un disgusto le costó entre sus propias filas defender esta postura.

Respecto al racismo, desgraciadamente, la ley francesa prohíbe la publicación de estadísticas basadas en la raza o el origen étnico, sin embargo, si publica estadísticas basadas en los ingresos familiares y en el nivel educativo, y es ahí donde el Frente Nacional arrasa.

El 32% de los franceses que ingresa menos de 1.250€ mensuales votan al Frente Nacional y el 30% de los franceses que sólo tiene la educación básica obligatoria, apuesta por el Frente Nacional. No hace falta decir, que la gran mayoría son hijos de inmigrantes que llegaron a una Francia llena de oportunidades, y que ahora ven que su futuro es más lúgubre que el de sus padres, abuelos o bisabuelos.

Con los hechos encima de la mesa, cabría preguntarse: ¿qué es exactamente el Frente Nacional? Definir al Frente Nacional no es una tarea sencilla, cualquiera que dedique 1 hora a leer el programa electoral del Frente Nacional, puede darse cuenta de la cantidad de corrientes políticas que alberga. Está compuesto por tintes propios del socialismo nacional (nacionalización de empresas); un fuerte carácter mercantilista (fortalecer la economía nacional estableciendo aranceles desorbitados al resto de los países para incentivar la demanda interna de productos nacionales); se posiciona abiertamente en contra del libre mercado (sacar a Francia de la UE y romper los acuerdos con terceros países); apuesta por el intervencionismo económico (incentivar la financiación pública a través de un ‘’proteccionismo inteligente’’ tal y como lo denominan en su programa electoral); propone aumentar la participación ciudadana en la política (permitiendo que se celebre un referéndum sobre cualquier tema si se obtienen 500.000 firmas) y también, medidas propias del socialismo puro, como instaurar una ingreso mínimo vital de hasta 1.500€ al mes.

Como pueden ver, el Frente Nacional toca todos los palos para conseguir el voto de diferentes segmentos de la población, pero sin duda, está mucho más cerca de la izquierda que de la derecha. Soy un idealista, pero no soy estúpido. No albergo ninguna esperanza en que aquellos que quieran refutar con datos y no con soflamas las medidas de Le Pen, se metan en la página web oficial del Frente Nacional, descarguen su programa electoral y lo lean, para así dejar de decir estupideces y combatir las ideas de un partido anclado en el siglo XX con argumentos de peso.