Las palabras se las lleva el viento y de nada vale que los clubes se empeñen en dejar claro que no debe mezclarse fútbol y política. Mientras la situación que gira en torno a la independencia de Cataluña, el procés y la aplicación o no del artículo 155 de la Constitución no se tranquilice, y parece que va para largo, todos los ámbitos de la vida social serán susceptibles de verse afectados. La polémica de las últimas horas en el mundo del fútbol español viene de la mano de la decisión del Real Madrid de no llevar su autobús oficial al encuentro frente al Girona.

Hay quien afirma que el equipo de la capital de España recurre a esto para evitar problemas debidos a la situación de crispación social que demuestran los catalanes frente a España, viendo este evento como un potencial punto caliente para demostrar su desacuerdo con las decisiones políticas tomadas en las últimas semanas.

Por el contrario, desde el Real Madrid se afirma que la razón primordial para no utilizar su autobús oficial en su desplazamiento a la localidad catalana es logística. El equipo blanco disputa un encuentro de Liga de Campeones el próximo miércoles en Londres, frente al Tottenham Hotspur, y necesitan su autobús oficial para los desplazamientos por la capital inglesa.

Girona, bastión de Puigdemont

Pese a que la actualidad política catalana se centre en la ciudad de Barcelona, debido obviamente a que allí se encuentran las principales sedes de las administraciones políticas catalanas, la figura más representativa del "lado oscuro" catalán se hace fuerte en Girona. Carles Puigdemont, el hasta ahora President de Cataluña, fue alcalde de la ciudad antes de llegar al escalón más alto de la política regional, y es allí donde cuenta con un mayor número de simpatizantes como se ha visto en repetidas ocasiones.

Atendiendo a esto, no es extraño que el President acostumbre a dejarse ver por el palco del Municipal de Montilivi, estadio del Girona Fútbol Club. Su última aparición en el campo de fútbol tuvo lugar el pasado 23 de septiembre con el enfrentamiento entre el club local y el FC Barcelona. Aquel día fue recibido entre aplausos y gritos de animo, cuando aún la tensión con España estaba empezando, y el partido terminó con una invasión de campo por parte de los aficionados rojiblancos.

El enfrentamiento Madrid-Cataluña

Regresando a la actualidad, la situación política ha dejado claros dos bandos: España, representado desde Madrid, y Cataluña, representado desde Barcelona. Se ha conseguido así que el enfrentamiento futbolístico por excelencia en el país, el que protagonizan Real Madrid y FC Barcelona, haya traspasado la frontera de lo deportivo a lo político de la manera más radical. Siempre había existido esa relación entre política y fútbol, asociando las dos posturas políticas a los dos equipos, pero actualmente es algo que ha llegado casi al extremo.