Los viajeros 3.0 tienen como lema siempre es bueno viajar. Buscan experiencias únicas y las comparten transformando al Turismo en una práctica colaborativa. Con un perfil curioso e hiperconectado están disponibles siempre para ayudar a quienes están viajando o desean hacerlo.
En un contexto de reinterpretación de la comunicación masiva, el turismo no ha quedado fuera de este fenómeno. Las personas buscan y comparan información. La afirmación de Vittoria Calvi en su artículo Guía de Viaje y turismo 2.0: los borrosos confines de un género (2016) “El turista 2.0 (…) distinta a la del turista de masas; gracias a su participación en las redes sociales y en la comunidad de viajeros”.
Diariamente se presentan ofertas a diferentes destinos en todos los servicios turísticos: vuelos, hospedajes, traslados, excursiones, gastronomía, espectáculos. Sin embargo, ¿cómo seleccionar? ¿De qué se tratan todas esas aplicaciones para buscar, gestionar e incluso pagar por un producto intangible?
Los viajeros 3.0 resuelven interrogantes siendo algunos influencers. Planifican, disfrutan y comparten sus experiencias. Son conocedores de los días indicados para acceder a promociones, descuentos en vuelos, así como visitas guiadas gratuitas y sitios donde comer barato. Además, valoran las alternativas culturales y descubren sitios poco explorados de riqueza turística.
Con perfil resolutivo usan las redes sociales o blogs donde plasman sus vivencias: qué llevar en un viaje de corta duración, claves de wi-fi de los aeropuertos, cómo hacer si se pierde una valija, qué aplicaciones recomendables para compartir habitación.
Los viajeros 3.0 tienen como principal valor ser ellos mismos.
Estos nuevos rasgos del mercado no han pasado desapercibido para los profesionales del sector. Por eso en la última World Travel Market llevada a cabo en Londres, Andy Mallinson de EMEA reconocía el cambio drástico en el comportamiento de los usuarios como resultado de una tormenta producida por la conjunción de móviles y redes sociales.
El contenido es la clave
Los viajeros 3.0 con su Smartphone en mano, registran lo que les sucede en cada lugar que visitan y comparten la información con otros trotamundos para ahorrar tiempo en resolver problemas e invertirlo en una planificación estratégica. En una entrevista concedida al diario digital Hosteltur, Expedia Affiliate Network hizo hincapié en el uso del celular y en el contenido teniendo a los influencers como socios del mismo.
Un ejemplo de haberlo comprendido es la cadena hotelera Barceló que apostará por la segunda edición Influencers stories en el 2018 donde 50 influencers internacionales compartirán sus experiencias mientras viajen. Uno de los objetivos es impactar a través de contenidos que inspiren a otros a vivir la aventura en sí mismos.
La conexión entre viajeros 3.0 y sus seguidores es permanente porque se comparten relatos y aparecen las preguntas; en caso de las fotografías o videos se dejan comentarios que le darán al viajero potencial curiosidad. Esta interacción es clave para formar una red entre viajeros formándose guías completas online de turismo.
Lo que emerge entonces es un turismo colaborativo como práctica que implica que los demás agentes deberán reorganizarse en pos de crear contenido a través de los influencers que viajan o viajeros 3.0.