El lanzamiento en mayo del nuevo sistema de verificación en Twitter se ha visto ensombrecido por el descubrimiento de un usuario llamado @conspirator0: la red social dio la insignia de verificado a cuentas (al menos 6) creadas el 16 de junio, sin tweets, sin followers y sin actividad aparente. La plataforma de microblogging ha tenido que dar la cara, admitiendo el error –que achacan al algoritmo– y se ha visto obligada a suspender las cuentas.

El nuevo sistema de verificación quería evitar errores similares que ocurrieron en 2017

Justamente, el nuevo sistema de verificación se había presentado como la solución a los problemas que tuvieron con esta función en 2017 –verificaron cuentas que promovían la violencia o no cumplían los requisitos– haciendo que los criterios para obtener la verificación en la red social fuesen mucho más específicos.

Las cuentas falsas fueron creadas por una botnet

De este modo, las seis cuentas descubiertas por el usuario @conspirator0 no solo no cumplían las nuevas reglas para ser verificadas –como pertenecer a personas reales, ser activas y publicar contenido apto– sino que descubrió que pertenecían a una botnet (red de bots informáticos automatizados para lanzar spam o ataques de virus) que en junio creó miles de cuentas falsas, con imágenes de archivo o creadas por IA (Inteligencia Artificial) y que sólo se seguían las unas a las otras para parecer cuentas normales.

Estas cuentas lo que pretendían era hacer spam para infectar ordenadores

La ‘misión’ de estas cuentas bot era la de publicar spam, poniendo tweets con enlaces que te pudiesen llevar a páginas con malwares, el cual se introduciría en el ordenador al clicar el enlace o al ofrecerse rellenar formularios con datos personales para que fuera el usuario quien abriese la puerta al PC.

Una cuenta verificada da más confianza al usuario medio

Precisamente el símbolo de verificación hace que los usuarios bajen el guardia, dado que es algo muy difícil de conseguir, por lo que es el cebo perfecto para una estafa o ataque en la red. De ahí la peligrosidad de la situación que le ha creado un quebradero de cabeza a Twitter, pues todavía la compañía no sabe cómo esas cuentas han pasado el nuevo proceso de verificación.

Alex Stamos señala a los trabajadores posibles culpables de este hecho

El ex director de seguridad de Facebook, Alex Stamos, no ha dudado en señalar que el problema haya podido ser humano, y que los cibercriminales hayan comprado o sobornado al personal que se encargaba de las verificaciones (cada país tiene un equipo para verificar cuentas). Sólo se sabe que todas estas cuentas fueron creadas en Turquía.