Los medios de comunicación han dejado una huella permanente en la historia de la humanidad. Necesitamos vivir diariamente informados, de lo que sucede en nuestra región y en el mundo. La televisión se convirtió en el aparato clave, para la difusión de las noticias más importantes del día. Y muchas personas todavía siguen siendo fieles a la trasmisión regular del noticiero de la mañana, tarde y noche, como los tres alimentos del día, una costumbre llevada religiosamente, quizá porque los padres de familia llevaban este mismo hábito. La noticia en la época actual, es un tanto desligada de la realidad, se adorna a veces con tintes cómicos y memes, para caer en una desaprobación de la veracidad – por parte de las cadenas periodísticas.
Con las nuevas tecnologías de información y comunicación, muchas personas se han dado a la tarea de buscar y analizar la noticia principal, el titular que va a la vanguardia de otros, porque todos tienen derecho a tener una información, sin dramatismo y protagonismo telenovelesco. Internet sin duda ha ayudado a enfocar nuestra atención, a los distintos rostros de la información. La denuncia ciudadana, es un fenómeno que esclarece los hechos en momento real y es por eso que la opinión pública, busca desacreditar estos periodistas ciudadanos, con cliches, y comicidad para que jamás vuelva a levantarse la verdad ante el ridículo.
Falta de confianza en las redes
Muchas personas van dejando de lado el fenómeno social, y el reflector artificial de las redes.
Hay muchas otras que dependen incansablemente del acoso de varios usuarios, no importando si los comentarios son buenos, malos o si es una burla estandarizada. Sin embargo, tras lo acontecido en Cambridge Analytica y la pobre interpretación del señor Zuckerberg, el imperio ha sucumbido a la opinión pública, y la idolatría ha descendido al mismo infierno.
Testimonios digitales, experiencias e incomprensión
La reciente encuesta de Edelman, relaciones públicas ha despertado la curiosidad de la audiencia digital, ya que el sesenta por ciento de las personas encuestadas – Reino Unido, Canadá y EE.UU, entre otras cuatro naciones – expusieron resultados concernientes al hervidero de vicios sociales, de los que son parte las redes sociales.
Estos datos confirman que los medios sociales, no han sido eficaces para intervenir ante las fake news y asegurar la privacidad de los usuarios. La realidad es que muchas empresas utilizan estos medios de difusión masiva, y desgraciadamente tendrán que abandonar el barco en algún momento para no verse afectadas.
