Ramón López de Mántaras, director del Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial (IIIA), señala que ninguno de los grandes éxitos de la Inteligencia Artificial como Siri, Cortana o Google Translator "hace ningún tipo de análisis somático de la lengua; es decir no entienden absolutamente nada".

López explica que aunque den "la respuesta correcta" a una pregunta, tras reconocer el habla, eso no significa que "hayan hecho un análisis profundo de ese resultado sino que se basan en técnicas mucho más superficiales" que funcionan gracias al análisis estadístico "de grandes cantidades de datos disponibles gracias a Internet y gracias a que nosotros de forma voluntaria facilitamos muchos datos en las redes sociales".

López indica que si se quiere pasar de "inteligencias artificiales específicas a inteligencias artificiales más generales no quedará más remedio que intentar dotar de alguno de los conocimientos tácitos del sentido común a las máquinas".

El investigador señala que "tarde o temprano" habrá robots domésticos en las casas. "Serán robots muy sofisticados con Inteligencia Artificial pero si carecen de sentido común y sus valores no están alineados con los de los seres humanos serán unos optimizadores perfectos; es decir, harán lo que sea para satisfacer nuestras demandas".