Tres cornadas y traumatismo toráxico es el resultado de la embestida que recibió un niño en la fiesta taurina de Puçol, un municipio de la provincia de Valencia. El menor, de doce años, fue corneado por una vaca en el recinto donde se celebraba la Semana Taurina de la localidad y se encuentra ingresado en estado grave en el Hospital Clínico de Valencia, al que fue derivado desde el hospital de Sagunt, donde fue evacuado inicialmente. Ha tenido que ser intervenido quirúrgicamente por las graves heridas de hígado y riñón y se espera su evolución.

La Policía Autonómica investiga cómo entraron los menores al sitio prohibido

El trágico hecho ocurrió aproximadamente a las tres de la madrugada del domingo en el recinto donde se celebraba la fiesta. El niño acudió acompañado de otros dos menores, su primo de catorce años y un amigo de quince al lugar prohibido para menores de edad debido a su peligrosidad, por lo que la Policía Autonómica está investigando cómo entraron los tres.

El niño sufrió tres cornadas y se encuentra grave

La embestida tuvo lugar cuando el niño se encontraba en el cadafal en el momento de la suelta, pero una vaca lo enganchó con un cuerno por un brazo, lo sacó y lo embistió en repetidas ocasiones. El niño recibió tres cornadas y sufrió un traumatismo de tórax que afectóa al hígado y a los riñones.

Un muchacho consiguió rescatar al menor y ponerlo a salvo del animal, para ser evacuado inmediatamente.

La Associació de Penyes de la Setmana Taurina de Puçol ha emitido un comunicado para dar explicaciones de las medidas de seguridad que se tomaron durante la semana de las fiestas tradicionales. En el mismo afirman que la entrada está prohibida a los menores de dieciséis años por el peligro que suponen la suelta de reses bravas.

También que a los menores se los acompañó varias veces al exterior y que estaban al tanto de la prohibición.

Para las autoridades, los menores se podrían haber valido de un engaño

Por otra parte, las autoridades advirtieron que también se podrían haber valido del “engaño por parte de quienes sacan entradas a través de algún adulto que les presta ayuda para ello” y que resulta "imposible en estos casos controlar de manera exhaustiva la venta de entradas".

El niño vive con su familia en el barrio de Porto Segunto, pero el fin de semana se encontraba al cuidado de su abuela. Fue junto a su primo y un amigo, trasladados por la madre de uno de los menores a quien convencieron de que los llevara porque habían quedado con unas chicas para ver juntos los bous al carrer. Las fiestas se desarrollaban bajo el lema “Por tu bien y el de la fiesta, vive los toros en modo 0,0” y se esperaba reducir los accidentes de las habitualmente peligrosas fiestas. Pocos minutos antes de finalizar, el niño fue corneado.