El pasado sábado fue declarado un incendio localizado entre Navalacruz y Cepeda de la Mora, en la provincia de Ávila. Ayer, lunes 16, la Junta de la comunidad autónoma de Castilla y León concedió su autorización para que pudieran regresar a sus domicilios las más de mil personas que fueron evacuadas debido a la cercanía de las mismas respecto a este gran incendio que hoy sigue amenazando esta provincia castellanoleonesa.
El incendio declarado en la provincia de Ávila ya ha calcinado más de 12.000 hectáreas
Este incendio, el cual ya cuenta con un perímetro que oscila entre los 70 y los 90 kilómetros, ya ha calcinado más de 12.000 hectáreas.
Tanto los residentes de los municipios de Villaviciosa y Robledillo, como los de Sotalbo y Palacio (pedanía de este último), han podido volver a sus casas tras haberlas desalojado la semana pasada, ahora que el riesgo ha disminuido considerablemente, según ha informado a los medios de comunicación el delegado territorial de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández. En cualquier caso, se ha decidido mantener el nivel 2 de peligrosidad para este incendio.
Hernández también ha informado de que todavía se encuentran trabajando frente a condiciones adversas, debido a las fuertes rachas de viento que se siguen manifestando en la provincia abulense y que complican las tareas de extinción, para las que sean desplegado más de dos decenas de medios aéreos, además de 10 técnicos desplazados a la zona, 17 cuadrillas de tierra, 18 camiones autobombas, 26 agentes medioambientales, 3 buldócer, 30 cuadrillas de especialistas en la lucha contra incendios forestales y 7 helicópteros.
Por otro lado, el Ministerio para la Transición Ecológica ha incorporado algunas dotaciones de la UME, 12 brigadas de investigación de incendios forestales, un avión de coordinación y 4 helicópteros de diferentes comunidades autónomas.
Se intenta evitar el avance de las llamas en Navalmoral y San Juan del Molinillo
En gran medida, los esfuerzos por parte de los miembros de los diferentes operativos implicados en las tareas de extinción se centran en tratar de evitar el avance de las llamas en Navalmoral y San Juan del Molinillo.
Durante la noche de ayer, el tráfico permaneció cortado cerca de estas dos últimas localidades castellanoleonesas.
Bomberos y vecinos lograron salvar las viviendas de las llamas
Los vecinos de las localidades afectadas han contado en Televisión que, entre los bomberos y ciertos vecinos que decidieron quedarse para ayudar, lograron salvar las viviendas de los habitantes de las diferentes localidades, lo cual han calificado como “un milagro”. No obstante, se han producido importantes daños entre quienes trabajan en la industria ganadera.
