Un vehículo autónomo operado por Uber golpeó y mató a una mujer en Tempe, Arizona. Se cree que la mujer es la primera persona asesinada por un vehículo autónomo.
El servicio de paseo ha estado probando autos sin conductor con controladores de respaldo que podrían tomar el control para evitar accidentes y desarrollar tecnología de conducción autónoma en un esfuerzo por lanzar un servicio autónomo de viaje compartido. En respuesta al accidente, Uber está suspendiendo las pruebas automotrices en Tempe, San Francisco y Toronto.
¿Los carros autónomos son seguros?
Los defensores de los vehículos autónomos han argumentado durante mucho tiempo que los autos autónomos serán mucho más seguros que los manejados por conductores humanos, pero la industria del transporte todavía enfrenta la ansiedad de clientes potenciales que no se sienten cómodos con la idea de viajar en un vehículo sin un conductor humano.
Las muchas distancias conducidas sin grandes incidentes por autos sin conductor de compañías como Waymo y General Motors pueden respaldar la idea de que los vehículos autónomos son, incluso en un estado primitivo, más seguros que los manejados por humanos. Pero las compañías automotrices y de movilidad tendrán que persuadir a los legisladores y al público en general de que los accidentes que involucran vehículos que se conducen a sí mismos son anomalías y no señales de fallas tecnológicas.
Los problemas de Uber
Travis Kalanick, el cofundador y CEO de Uber, renunció siendo el principal ejecutivo de la compañía. Los expertos de la marca dan la bienvenida al cambio, diciendo que es el primer paso que Uber necesita para reinventarse a sí misma. La compañía y el ascenso y caída de Kalanick ofrecen varias lecciones para otras marcas.
Las marcas no deben despriorizar la cultura, responder rápidamente frente a una crisis, nombrar a los líderes adecuados y cultivar a sus empleados como sus principales defensores, dicen los expertos.
Una semana después de que Travis Kalanick anunciara que se tomaría una licencia por tiempo indefinido, el CEO de Uber fue un paso más allá y renunció al cargo de principal ejecutivo de la compañía.
La medida fue presionada por los principales inversores de Uber, incluidos Fidelity y Benchmark, que le pidieron a Kalanick que renunciara a raíz de los numerosos escándalos que han plagado a la compañía en los últimos meses.
Uber ha sido arrastrado en un torbellino de descontento social recientemente, que perjudica a la marca. Es algo que los expertos en branding dicen que podría haberse evitado.