A todos nos resulta preocupante el porqué de esta situación. Según la Guardia Civil, José Enrique Abuín Gey, alias El Chicle, era el principal sospechoso de la desaparición de Diana Quer, pero en algún momento dejaron de hacerle el seguimiento. ¿Por qué? ¿Por qué si es el potencial artífice de la desaparición de una muchacha se le deja de investigar? ¿Por qué se prefiere cerrar el caso de manera provisional?

El Chicle tiene antecedentes

El captor y asesino de Diana Quer tiene antecedentes de diversas índoles. Posee una denuncia por agresión sexual, por narcotráfico y contra la seguridad vial.

Pero aún así se le deja. Parece que la vara de los cuerpos policiales no aplican a todos de la misma manera, o por lo menos existen ciertos "favoritismos". Y es que las instituciones de seguridad parecieran tener mucho más ímpetu cuando se trata de proteger a quienes ostentan el poder, a quienes cuestionan y trabajan por realizar cambios profundos en los sistemas que nos rigen, a quienes poseen lugares de privilegios. Y Diana Quer no es nada de eso. Es una chica torcida que se buscó su mala fortuna.

Y entonces, ¿cuál es la explicación que entrega la Guardia Civil para justificar el fin de la investigación? Pues que las líneas se cruzaron. Así, sin más. Que por alguna mala coincidencia, la ubicación satelital de los móviles de Diana Quer y de El Chicle, a pesar de estar juntas, se separaron en el momento menos indicado.

Entonces se perdió la principal pista, y como los parientes más cercanos al sospechoso apoyaban su coartada, la víctima siguió desaparecida.

Justicia con las mujeres violentadas

Ahora que el caso se encuentra otra vez en marcha, esperamos con todas nuestras fuerzas que se pueda hacer justicia. Que no se tarden 500 días en preguntarle a la compañía de teléfonos si es posible que las ubicaciones de los móviles cambien, que no se usen como guías de investigación las declaraciones de los parientes más cercanos, que no se tomen a la ligera los casos de violencia contra la mujer.

Porque creo que a la larga es eso, desinterés, negligencia, falta de voluntad. No digo que sus argumentos para dejar la investigación sean falsos, sino que tal vez, si hubiese sido alguien más "importante" la víctima, no se habría detenido tan fácilmente el proceso. No se dejaría que el principal sospechoso volviese a actuar para tomar cartas en el asunto. Tengamos claro que esta no es una situación aislada, que las mujeres están siendo constantemente violentadas y que hay irresponsabilidad a la hora de tratar el tema.