La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin están cada vez más cerca del divorcio. A finales del pasado mes de marzo, ambos quedaron para firmar la disolución de las capitulaciones en Ginebra, el paso previo para divorciarse. En la firma llegaron a varios acuerdos que la revista Semana ha publicado en exclusiva este miércoles, entre ellos: la custodia de los hijos y el derecho o no de pagar una pensión por ellos, todo el proceso guiados y asesorados por un abogado de la Casa Real.

El fin del matrimonio de la infanta e Iñaki

Las fotografías de Iñaki Urdangarin con Ainhoa Armentia paseando acaramelados como novios, en una popular revista marcaron un antes y un después en la relación con Cristina de Borbón.

La pareja, tras hacerse pública la infidelidad del exduque de Palma, ponía punto y final a su relación e informaban en un comunicado la interrupción del matrimonio. Han pasado varios meses y por el momento aún no se han divorciado, pero sí que han firmado ya la disolución de capitulaciones, el paso previo necesario para poder hacer efectivo el divorcio.

Iñaki Urdangarin no deberá pagar ninguna pensión por sus hijos

En la disolución de capitulaciones que firmaron este pasado mes de marzo la pareja acordó que la infanta Cristina se quedaría con la custodia de los cuatro hijos, pero Iñaki Urdangarin podrá ir a verlos siempre que lo desee. Por otra parte, no hará falta que el exduque de Palma pague ninguna pensión por ellos, ni tampoco recibirá ninguna compensación económica por parte de la que todavía es su mujer.

Una resolución judicial favorable para ambos, teniendo en cuenta que la hija de Juan Carlos I es la que tiene mayor poder económico.

Un abogado de la Casa Real ha dirigido todo el proceso

La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin no han estado solos durante el proceso de la firma de la disolución de capitulaciones, un abogado de la Casa Real ha dirigido todo el trámite.

En su día, en 1997 cuando se casaron, se unieron acordando un régimen de separación de bienes, y también entonces los abogados de la Casa Real asesoraron a la pareja e incluso les hicieron firmar un documento donde tenían instrucciones de cómo actuar en caso de que en un futuro decidieran divorciarse.

Tras lo ocurrido, Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin deberán acabar firmando el divorcio, y después de haber dado este paso con la resolución de las capitulaciones debería ser en un plazo corto de tiempo en el que sus caminos se separen de manera legal.