Después de haber reconocido "la responsabilidad institucional de la Iglesia", los obispos de Francia se comprometieron este lunes 8 de noviembre a indemnizar a las víctimas de la pederastia. Para ello, el episcopado emitió el ‘Informe Sauvé’ donde se compromete a conformar un fondo de compensación mediante la venta de bienes y no excluye el préstamo.

El 'Informe Sauvé' reconoce a las víctimas de pederastia y las indemnizará

Una comisión independiente encabezada por un abogado se encargará de examinar las solicitudes de las 330.000 víctimas que se calcula que hay en Francia en los últimos 70 años, muchos de los cuales ya han muerto.

Las medidas comprometidas en el encuentro episcopal celebrado en Lourdes incluyen la creación de un tribunal canónico para imponer penas a quienes hayan abusado de menores o hayan protegido a los curas abusadores a través de un protocolo junto a las fiscalías francesas. “Entendimos que necesitábamos ayuda externa. No estamos capacitados para ser investigadores, fiscales o jueces de instrucción” afirmó el obispo Eric de Moulins-Beaufort, presidente del episcopado galo.

La Iglesia francesa asume la responsabilidad histórica de los abusos

Moulins-Beaufort también afirmó que para las indemnizaciones no se tocará el dinero de los fieles y sus donaciones, sino que se buscarán los bienes inmuebles en patrimonio de las diócesis y la Conferencia Episcopal.

Además, si el dinero no alcanza, pedirán créditos.

La actitud de responsabilidad histórica sobre los abusos y la pederastia que pesa bajo una porción de los sacerdotes de la Iglesia Católica asumida por el clero francés no es la única. Medidas así ya se ponen en práctica en otros países europeos como Reino Unido, Alemania, Austria, Holanda, Polonia y Suecia.

El paso dado por los franceses despertó también en Portugal el compromiso de la búsqueda de la verdad sobre los abusos de Niños y adultos cometidos en el seno de la Iglesia.

La opaca postura de la Iglesia española

Distinto es el caso de España: "No vamos a hacer seguramente de manera proactiva un programa de investigación general", aseguró hace un mes el portavoz de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Luis Argüello.

De hecho, el episcopado español tan solo reconoce 220 casos de abusos en los últimos 20 años, según los números oficiales remitidos al Vaticano a la Congregación para la Doctrina de la Fe, la institución que se ocupa de los problemas morales y pastorales relacionados con la responsabilidad institucional de la Iglesia. Un número demasiado bajo en relación a los casos documentados por el ‘Informe Sauvé’ francés.

Para Argüello ”las denuncias han sido mínimas en este último año" y desde las profundidades de la Iglesia española se sigue negando el espanto y las víctimas. No hay en marcha ninguna investigación institucional que ponga al episcopado al lado de la regularización de sus homólogos franceses para reconocer e indemnizar a los agraviados por los abusos.